La emotiva carta del hombre detenido en Madrid por ayudar a su mujer enferma a morir

La Policía Nacional ha detenido a Ángel Hernández tras ayudar a morir a su mujer María José Carrasco, de 62 años, que sufría esclerosis múltiple desde los 32 y que le había pedido en reiteradas ocasiones que acabara con su vida. Ahora podría enfrentarse a una pena de hasta 10 años a prisión.

Según informa ‘El Mundo’, que cita fuentes de la Jefatura Superior de Policía, el hombre ha sido detenido por homicidio.

Tras 30 años de enfermedad en los que ha sufrido dolores que solo disminuían con morfina y cuidados, el hombre decidió este miércoles cumplir con su promesa ante la ausencia de una ley de eutanasia que respondiera a los deseos de su mujer.

El ahora detenido le dio a beber arsénico no sin antes pedirle su consentimiento. Una vez que le dio el veneno, Ángel llamó a la policía, informándoles de que su mujer estaba muerta.

Cuando los agentes llegaron a la casa en el distrito madrileño de Aravaca-Moncloa, el marido les reveló que le había dado arsénico porque estaba enferma en fase terminal. Tras la confesión le detuvieron al tiempo que los efectivos del SUMMA solo pudieron confirmar el fallecimiento de María José.

En el momento de la detención los agentes también retuvieron al periodista Agustín Pérez, de ‘Cuatro’, por encontrarse en el lugar de los hechos. El reportero informó hace unos meses del caso y se hicieron amigos. Tras el fallecimiento de María José, el marido le llamó para que fuera a despedirse.

En declaraciones a ‘El Programa de Ana Rosa’, Agustín ha sido claro: «Su marido no se quiere ocultar y quiere que se sepa que ha ayudado a su mujer a tener una muerte digna. Solo una persona que te quiere de esa manera te puede ayudar a dar ese paso».

Para que quedara constancia de los hechos, Ángel grabó todo el momento y en las imágenes se ve cómo le pregunta si está decidida a morir y tras asentir con la cabeza le dice: «María José ha llegado el momento que tanto deseabas. Yo te voy a prestar mis manos».

Tras confirmar su deseo de morir y que podía tragar con una pajita, el detenido le ofreció arsénico con un vaso de agua: «Te lo doy. Tienes que soportarlo. ¿Estás decidida? Ahí tienes. A ver dame la mano que quiero notar la ausencia definitiva de tu sufrimiento».

El Grupo V de Homicidios se hace cargo de la investigación.

Tras la muerte de María José y la detención de Ángel, la Asociación Derecho a Morir Libremente ha enviado a los medios una carta, escrita por el propio Ángel y fechada el pasado 10 de marzo.

«Somos defensores de que la eutanasia sea considerada como un derecho de libre elección de toda persona que arrastre una enfermedad irreversible en la que le produzca una existencia de dependencia y sufrimiento que no desea.

Esta historia quedará concluida cuando María José en su derecho a poner fin a su malvivir y en uso de su libertad decida seguir adelante con su suicidio. Es evidente que el deseo de María José a fin de que se cumpla necesita que se la ayude, por su incapacidad a realizarlo por ella misma, y como es una constante en ella demandar ese auxilio no habrá más remedio que proporcionarle esa ayuda para que su deseo se cumpla».