WWF pide más recursos para las operaciones policiales contra el tráfico de angulas

La organización ambiental WWF reclamó este miércoles más recursos para los operativos policiales de lucha contra el tráfico de angulas (alevín de la anguila) después de que la última operación haya concluido con la primera condena en España contra este delito con 1,5 millones de euros de multa y seis años de cárcel para las personas implicadas.

WWF felicitó en un comunicado al Seprona por su investigación y celebra «esta condena ejemplar, que revela el gran negocio detrás de este contrabando», pero consideró «necesario» endurecer el Código Penal y pidió más medios para estas operaciones.

Desde hace años, la anguila concentra la mayor preocupación en cuanto al tráfico de especies en España por estar muy amenazada y cuya fase temprana de desarrollo, la angula, es muy requerida en el mercado asiático. Las incautaciones de angulas con destino a China o Japón han pasado de 20 kilos entre 2005 y 2012 a más de 11.000 kilos desde entonces.

Además, añadió que se trata del único caso, junto al de las aves rapaces, en el que se comercia ilegalmente con una especie autóctona de la Península Ibérica. Así lo confirma el informe ‘El negocio de la extinción en España’ de WWF, que analiza el comercio legal y el tráfico ilegal en este país. Dado el papel clave que tiene España como puerta de entrada a Europa, la organización tiene en marcha la campaña ‘STOP Tráfico de Especies’, que cuenta con más de 150.000 apoyos y persigue frenar este crimen.

Para WWF, la actuación llevada a cabo por el Seprona y Europol demuestra la dimensión de este negocio llevado a cabo por mafias y grupos organizados, por lo que abogó por frenar la pesca ilegal y potenciar la investigación para desarticular las redes de transporte y venta ilegal.

Luis Suárez, responsable del Programa de Especies de WWF, indicó que «hay que continuar e intensificar las acciones policiales para frenar el tráfico de angulas, ya que constituye una de las principales amenazas para la supervivencia de esta especie tan amenazada» y agregó que «sentencias como ésta son muy importantes ya que tienen un claro efecto disuasorio».

«Sin embargo, sería conveniente revisar la normativa penal ambiental para que estas sentencias sean aún más contundentes e impliquen el ingreso efectivo en prisión. La naturaleza está siendo destruida a un ritmo inasumible y cualquier acción contra la biodiversidad debe ser castigada con la máxima dureza”, añadió.

Asimismo, WWF consideró imprescindible mejorar el conocimiento sobre la especie y la conservación de su hábitat. Para ello, esta organización y ANSE (Asociación de Naturalistas del Sureste) han liberado en el Mar Menor anguilas marcadas para investigar su comportamiento y tratar de resolver algunas de las muchas incógnitas que existen aún sobre esta especie.