Robles afea a Iglesias las discrepancias sobre el Sáhara o los PGE

La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha cargado este jueves contra el vicepresidente segundo del Gobierno y líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, por sus discrepancias en asuntos como el Sáhara Occidental o la enmienda presentada al proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) relativa a los desahucios.

«Formar parte de un Gobierno exige también unas responsabilidades», ha advertido Robles, que cree que las diferencias deben dirimirse en el seno de la coalición y, una vez tomadas las decisiones, todos los miembros del Ejecutivo deben ser «solidarios» y salir en su defensa.

«Cualquier miembro del Gobierno puede tener sus opiniones personales, pero el Gobierno es un órgano colegiado y tiene que estar a las decisiones que se tomen», ha insistido la ministra de Defensa desde la base de Retamares, en Pozuelo de Alarcón (Madrid), desde donde ha realizado una videoconferencia con rastreadores militares.

LA POLÍTICA EXTERIOR LA MARCAN SÁNCHEZ Y LAYA

En concreto, respecto a la situación de Marruecos y el Sáhara Occidental, Robles ha subrayado que la política exterior de un Gobierno la marcan su presidente y la ministra de Asuntos Exteriores. «Eso tiene que quedar muy claro. Cualquier otro miembro del Gobierno que tenga otra posición será a título particular, pero la postura la marcan el presidente y la ministra de Asuntos Exteriores», ha avisado.

Después de que Iglesias o el ministro de Consumo y líder de IU, Alberto Garzón, hayan hecho público su apoyo al Sáhara Occidental, Robles ha insistido en que la postura oficial del Ejecutivo es la que marcan Sánchez y Arancha González Laya y el resto de opiniones serán «a título particular».

Robles ya se ha desmarcado en anteriores ocasiones de las posturas adoptadas por Iglesias. Fue el caso recientemente del viaje en el que el vicepresidente segundo acudió junto al Rey a la toma de posesión del presidente de Bolivia, Luis Arce, y aprovechó para mantener un encuentro con los candidatos a las elecciones presidenciales de Ecuador y Perú y firmar la ‘Declaración de la Paz’, en la que sitúan al «golpismo de la ultraderecha» como la principal amenaza de la democracia y la paz social.

La ministra de Defensa hizo hincapié entonces en desvincular las actividades «particulares» de Iglesias del «objetivo» del viaje junto al monarca, al que iba como «invitado especial».

Robles ha calificado de «lógico» que Podemos quisiera formar parte del Gobierno –ha recordado que tuvieron que repetirse las elecciones generales por su negativa a apoyar un Ejecutivo en solitario del PSOE–, pero ha insistido en que una vez que se pertenece a un Gobierno de coalición deben asumirse «unas responsabilidades».

«Aunque tengamos opiniones contrarias, cuando hay una posición que se ha debatido en el seno de un Gobierno que hay que defenderla», ha emplazado incluyendo también en este planteamiento el proyecto de Presupuestos Generales, al que Unidas Podemos ha presentado en el Congreso una enmienda junto a ERC y Bildu para frenar los desahucios.

Robles cree que las cuentas públicas para el próximo año deberían salir adelante con el apoyo de los 350 diputados de la Cámara Baja porque deben marcar el camino de la «recuperación» de España. Por ello, ha rechazado «exclusiones» a fuerzas políticas o «vetos cruzados» entre partidos».

PRESUPUESTOS SIN EXCLUSIONES NI VETOS CRUZADOS

«No me gusta que ninguna fuerza política trate de hacer política partidista de unos Presupuestos que son de todos los españoles –ha defendido–. El Gobierno es Gobierno no solo de las personas que lo han votado sino de todos los españoles. A veces a lo mejor algunos miembros del Gobierno se olvidan de que tenemos que gobernar para todos los españoles y no solo para aquellos que nos han podido apoyar con sus votos».

Robles se ha situado así en contra de las «exclusiones» a partidos políticos o los «vetos cruzados» entre ellos y cree que en la actual situación «no sobra ningún voto». Según ha defendido, es momento de «generosidad» en política y atender a la petición que hacen los ciudadanos para dejar al margen «posiciones partidistas» y trabajar «conjuntamente».