El PP no aceptará en Andalucía que Ciudadanos busque una abstención del PSOE que condicione el cambio

El PP no aceptará que Ciudadanos busque en Andalucía una abstención del PSOE en la investidura del nuevo presidente autonómico, ya que para los populares esto condicionaría la alternancia, puesto que conllevaría algún tipo de entendimiento de la formación naranja con los socialistas.

Fuentes de la dirección popular aseguraron este lunes que si el PSOE acabara absteniéndose en la investidura del nuevo presidente andaluz, aun en el supuesto de perder la Junta, sería como consecuencia de alguna negociación. El partido de Albert Rivera ha expresado públicamente su deseo de una abstención socialista, que evitaría que el nuevo mandatario regional contase con el aval de Vox, al menos en la investidura.

Los responsables de la formación popular rechazan esta hipotética abstención de los diputados que encabeza Susana Díaz, puesto que el acuerdo de gobierno que quieren alcanzar con Ciudadanos en Andalucía será un escaparate de cama a próximas citas electorales.

Por este motivo, el PP busca articular con el partido de Rivera un pacto de gobernabilidad en la comunidad andaluza que permita sostener una buena gestión, pero sin contar para ello con una abstención del PSOE en la investidura, ya esto exigiría cesiones.

EL PSOE, EL NUEVO “APESTADO”

Desde la cúpula de la formación popular se entiende que el acuerdo con Ciudadanos en Andalucía y los primeros meses de la nueva Administración autonómica tendrán su repercusión en las elecciones municipales y autonómicas de mayo, incluso en las generales, sea cual sea el momento en que las convoque el presidente Pedro Sánchez.

A este respecto, los responsables del PP piensan sobre la fecha de las generales que los barones autonómicos socialistas quieren que sean marzo; la dirección del PSOE en Ferraz que se convoquen en mayo; mientras que Sánchez se decantaría por diciembre de 2019.

En todo caso, la dirección popular cree que la actual situación política y el mapa electoral salido de las andaluzas son más propicios al PP, con independencia de que pueda perder representación en las instituciones. Los populares consideran que es así porque la aparición de un bloque alternativo al PSOE en Andalucía -PP, Ciudadanos y Vox- hace que el partido de Casado haya dejado de ser el “apestado” de la política española.

Para el PP, el “apestado” ahora sería el PSOE, debido a que el nuevo mapa electoral puede que esta formación política pierda el poder en ayuntamientos y comunidades tras las elecciones de mayo.