El jurado encuentra culpable de asesinato a la enfermera que mató a una paciente de 92 años

El jurado popular ha encontrado culpable de asesinato a la auxiliar de enfermería de Alcalá de Henares juzgada en la Audiencia Provincial de Madrid acusada de causar la muerte o de intentarlo con dos pacientes a las que atendía. El jurado considera que es culpable del asesinato de una de las pacientes, de 92 años. En relación a otras dos supuestas víctimas, una de ellas fallecida y la otra no, el jurado no ha encontrado pruebas suficientes y ha emitido un veredicto de no culpabilidad, también por unanimidad.

En el primer caso, se la considera responsable de un delito de asesinato consumado. En el veredicto de no culpabilidad, el jurado ha debatido sobre la posibilidad de rebajar la calificación de asesinato a homicidio, pero por ocho votos contra uno esta controversia ha sido desestimada.

La Audiencia de Madrid juzgó el pasado 18 de junio a la enfermera Beatriz López Doncel por el asesinato de dos pacientes. La Fiscalía solicitaba 40 años de prisión para la enfermera, que trabajaba en el Hospital Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares, donde supuestamente habría inyectado aire a las víctimas, lo que les produjo una parada cardiorrespiratoria. También reclamaba una indemnización de 92.000 euros para los familiares de las víctimas en concepto de responsabilidad civil.

Beatriz López Doncel, según el escrito de acusación, trabajaba desde 2004 como auxiliar de clínica en el Hospital Príncipe de Asturias, siendo sus funciones el cuidado y atención de los pacientes ingresados en las habitaciones asignadas al control de enfermería B de la planta 5ª dedicada al servicio de la medicina interna.

El 29 de julio de 2015 la acusada entró supuestamente en una habitación ocupada por una paciente de 92 años a quien se le iba a dar el alta al día siguiente, según la Fiscalía, “con ánimo de causar su muerte de forma inmediata y aprovechando que en esos momentos no se encontraba acompañada de ningún familiar”, le inyectó con una jeringuilla una gran cantidad de aire en el sistema circulatorio a través de una vía. A consecuencia de ello la paciente entró en parada cardiorrespiratoria y falleció poco después a causa de una embolia gaseosa pulmonar masiva.

Dos años más tarde, el 2 de agosto de 2017, la enfermera entró en la habitación de una paciente de 86 años, a quien, según la Fiscalía, inyectó con una jeringuilla una gran cantidad de aire a través de una vía, provocando su fallecimiento a las pocas horas. La acusada se encuentra privada de libertad desde el 5 de agosto de 2017.

(SERVIMEDIA)