El Gobierno, partidario de retrasar un año la edad real de jubilación

El Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social se alineó este viernes con la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) y se mostró favorable a aumentar la edad efectiva de jubilación en un año para contribuir a la sostenibilidad del sistema de pensiones.

Fuentes del Ministerio precisaron que están de acuerdo con elevar la edad efectiva de jubilación un año, desde los 64,5 años que alcanzará en 2027 hasta los 65,5 años en 2048, como plantea la Airef. Sin embargo, se mostraron en contra de retrasar la edad legal de jubilación, que alcanzará los 67 años una vez que se aplique por completo la reforma de pensiones de 2011.

Las mismas fuentes explicaron que los puestos de trabajo son cada vez menos penosos y los procesos se automatizan más, lo que juega a favor de la sostenibilidad del sistema de pensiones por la vía de aumentar la edad efectiva de jubilación.

En este sentido, Trabajo especificó en un documento de opinión sobre el informe de la Airef que elevar la edad ordinaria de jubilación es una cuestión que “debe ir acompañada de una reflexión profunda sobre la tasa de reemplazo, introducir incentivos a la continuidad en el mercado de trabajo y la introducción de marcos flexibles entre actividad y jubilación”.

Desde Trabajo se manifestó que se tiene que retrasar la salida del mercado de trabajo en todos los colectivos, combinando actuaciones voluntarias y obligatorias, buscando fórmulas más flexibles en la jubilación, pero no es partidario de fijar edades de referencia altas para todos. A su juicio, es un modelo que hay que “olvidar”.

Este asunto, en el marco de estudio de las propuestas de la Airef, se abordará en el diálogo social a partir de la semana que viene y desde el Gobierno dejaron claro que no se aprobará ninguna medida sin el acuerdo con los interlocutores sociales y en la comisión parlamentaria del Pacto de Toledo.

En cuanto a otra de las propuestas de la Airef como es la extensión del periodo de cómputo para calcular la pensión, el Ministerio consideró que esta medida “acercaría la legislación española a estándares europeos y no debería producir efectos negativos”.

En cualquier caso, precisaron que hay que plantear un programa de reformas para conseguir que cuando llegue la jubilación de la generación ‘baby boom’, el Sistema se encuentre en una situación financiera “de más equilibrio” que la actual.

REFORMAS

Para solventar el déficit de la Seguridad Social y hacer sostenible el Sistema, el Ministerio apuntó que se deben identificar qué gastos deben ser financiados por las cotizaciones sociales y qué gastos deben financiarse con impuestos, en línea con la idea general de la Airef.

En cualquier caso, se consideró que “probablemente, las reformas no hayan de limitarse a las prestaciones de jubilación”, y las de incapacidad deben reorientarse. Mientras, para las de viudedad Trabajo apuntó que “han abundado las propuestas sobre la aparente contradicción de que la pensión de viudedad sea compatible con cualquier otro ingreso sin límites”.

Por otra parte, se explicó que la estimación de gasto en pensiones que realiza la Airef y que supondría un 13,4% del PIB en 2048 coincide con la del Ministerio y se argumentó que en esta cifra influye el incremento del número de pensionistas, las carreras de cotización cursadas en democracia con mejores bases de cotización y la actualización con el IPC de las pensiones hasta la crisis.

En cambio, en el documento de opinión sobre el informe de la Airef del Ministerio se afirma que “no somos tan rotundos al afirmar el carácter exclusivamente estructural de la evolución del gasto en pensiones, como tampoco de los ingresos”.

En esta línea, añade que el gasto en pensiones sobre PIB ha crecido en la última década menos que en los años precedentes porque el PIB ha crecido menos, y la disminución de los ingresos es un componente “muy acusado del incremento del déficit” del Sistema, entre lo que cabe destacar la influencia de la devaluación salarial y del aumento de bonificaciones y reducciones de cotización. En esta línea, aseguraron que hay que recuperar los salarios para recuperar las pensiones.

Desde el Ministerio también apuntaron que más de una cuarta parte de las personas que se jubilan lo hacen obligadas por “normativas inexplicables”, en referencia a la jubilación parcial de algunos colectivos.

Como consecuencia de todos estos factores, Trabajo consideró que la evolución del déficit es “exagerada”, pasando del 0,1% de 2010 al 1,5% en los últimos años.

En conclusión, considera que los factores coyunturales que influyen en el déficit “son tan relevantes que es difícil asegurar que el Sistema haya entrado en una situación estructural de déficit al margen de su impacto”.