Borrell cree que la pandemia del coronavirus puede considerarse el primer trauma de dimensión universal de la historia

SANTANDER, 17 (EUROPA PRESS)

El Alto Representante de Política Exterior de la Unión Europea y vicepresidente de la Comisión Europea, Josep Borrell, cree que la pandemia del coronavirus puede considerarse como «el primer trauma de dimensión universal» de la historia y considera que de la crisis que ha generado los europeos «saldrán convencidos de que hace falta más Europa».

«Está claro que los grandes riesgos de nuestro mundo son riesgos globales y éste (la pandemia) el más global de todos, y que ningún estado puede hacerles frente solo», ha subrayado Borrell, quien ha vuelto a reivindicar la necesidad de «reforzar la integración europea» durante la inauguración en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de un curso que aborda el futuro de Europa tras la crisis del COVID-19 y que dirige él mismo.

En su intervención de apertura del curso, Borrell ha advertido de que la crisis «no ha terminado» ni desde el punto de vista sanitario ni en el económico.

Ha reconocido que en Europa la crisis ha afectado económicamente «de una forma muy intensa» –España ha sido, según ha dicho, el segundo país más afectado, solo por detrás del Reino Unido, y en niveles similares que Francia e Italia»– pero con un impacto «asimétrico».

«Al principio tuvimos dificultades de coordinación para dar una respuesta sanitaria de conjunto, explicables, puesto que la UE tiene muy pocas competencias en materia sanitaria», ha comentado Borrell, quien considera que, después, la respuesta desde la UE ha sido «fuerte y eficaz» y ha ayudado a «amortiguar» los efectos.

En este sentido, ha aludido al paquete de medidas aprobadas desde Europa para la regeneración de los países miembros que, a su juicio, supone una respuesta «más rápida y eficaz» que la que hubo en la crisis del euro.

Sin embargo, Borrell ha advertido de que el precio que va a hacer pagar esta crisis del COVID-19 en términos de «cohesión social y de desigualdad en el mundo va a ser muy grande» y, ante ello, ha insistido en que hay que reforzar la integración europea.

Y en cuanto al efecto que la crisis del COVID-19 tendrá en otras partes del mundo, como EE.

UU, Borrell ha opinado que ese país saldrá de ella «debilitado» por la gestión que ha hecho de la pandemia.

Y es que Borrell ha afirmado que «es difícil de imaginar» que Estados Unidos sea capaz ahora de «relanzar» su economía como hizo en crisis anteriores, como la crisis financiera del 2008 o la que, a comienzos de siglo, se produjo a raíz del atentado de las Torres Gemelas.

A su juicio, lo que esta crisis va a hacer que se refuerce la rivalidad estratégica entre EE.UU y China.

Borrell ha subrayado la «fuerte incertidumbre» que existe entre lo que sucederá en las elecciones de noviembre en EE.UU.

El exministro de Exteriores de España también ha alertado de que «el gran sur» (América Latina, África y parte del sudeste asiático) también se está viendo «muy duramente afectado» por la crisis generada por el COVID-19 y ha alertado de que los «riesgos sociales y políticos» en esa parte del mundo «son enormes».

En ese sentido, Borrell considera que la capacidad de ayudar a esa zona del mundo va a ser determinante a la hora de saber «el papel que Europa va a jugar en el mundo» y también en la rivalidad que mantienen entre EE.UU y China.

Durante su intervención, el vicepresidente de la Comisión Europea ha insistido en que, a su juicio, «no había ocurrido nunca» un «trauma con una dimensión tan global» como el COVID-19, ni siquiera durante la Segunda Guerra Mundial –la cual, ha dicho, «no fue completamente mundial»– ni tampoco en pandemias anteriores ni en la crisis financiera de 2008.

Para Borrell, la pandemia del COVID-19 ha sido el «fenómeno más universal que hemos conocido», algo que ha atribuido a, entre otras cosas, «la extraordinaria capacidad de difusión» que ha tenido el virus por la «extraordinaria conectividad que tiene el mundo de hoy, desde el punto de vista informativo o de movilidad de las personas.

«A partir del mes de marzo todo el mundo, y quizá por primera vez en la Historia, todos los seres humanos tuvieron miedo frente a la misma amenaza», ha subrayado.

Borrell cree que la pandemia ha mostrado la «vulnerabilidad» de Europa en aspectos, a su juicio, «fundamentales», como lo que supone no tener capacidad de producir suficientes equipos de protección frente al virus, o la dependencia de antibióticos procedentes de países de fuera de la UE, como China e India.

Por ello, ha alertado de los riesgos de volver a la normalidad que existía antes de marzo. «Era un mundo con una excesiva dependencia, inseguridad financiera e irresponsabilidad ecológica. Espero que la vuelta a la normalidad no sea volver a esos parámetros de comportamiento», ha explicado.

EL «MULTILATERALISMO», EL «MEJOR ARMA» PARA SALIR DE LA CRISIS

Este curso dirigido por Borrell tiene como secretario al director de la Comisión Europea en España, Francisco Fonseca, quien, en un encuentro con los medios, ha defendido que el «multilateralismo» es «el mejor arma para salir de la crisis» generada por el COVID-19.

Fonseca ha reivindicado las medidas y líneas de ayudas puestas en marcha para afrontar esta crisis, no solo con los fondos aprobados para el plan de reconstrucción, que arrancará el próximo año, sino con otras para afrontar la situación «a corto plazo».

«La UE lleva gastados casi 2 billones de euros», ha dicho Fonseca, que ha aludido, por ejemplo, a las ayudas públicas a los sectores en crisis.

También ha resaltado la «inversión decidida» a nivel europeo en política de salud con la financiación por parte de la UE de 17 proyectos interdisciplinares europeos que hay en marcha para lograr una vacuna, con una inversión de 140 millones de euros.

«Estamos sin ninguna duda en el sprit de favoritos en el desarrollo de vacuna», ha opinado en relación a la del COVID-19.

Además, Fonseca ha subrayado también la importancia de otras medidas adoptadas como las compras de material médico conjunta que se ha puesto en marcha.

Sobre el plan para la reconstrucción aprobado, Fonseca ha señalado que en él tendrán un papel «fundamental» las acciones encaminadas a la transición ecológica (el 30% del total se quiere dedicar a planes de este tipo, según ha indicado).