Cinco consejos para proteger tus perfiles sociales de los ‘ciberpiratas’, según el Banco Santander

Facebook, Twitter, Instagram, LinkedIn, WhatsApp, YouTube… Alrededor de tres millones y medio de personas tienen un perfil en las redes sociales. Un complejo mundo de interconexiones con infinitas posibilidades, pero también con importantes brechas de seguridad por las que los ‘ciberpiratas’ navegan a sus anchas. Todos los días se producen robos que ponen en peligro la navegación en internet: pérdida de privacidad, propagación de virus, víctimas de suplantación… Facebook reconocía hace un año un ataque informático que comprometía la información de 30 millones de usuarios, principalmente de datos personales y contactos.

Según un estudio realizado entre internautas de Estados Unidos por Verizon Media, empresa matriz de Yahoo!, uno de cada cinco usuarios de redes sociales asegura que en alguna ocasión ha sentido que han violado su privacidad y una de cada diez personas ha sufrido el hackeo de su cuenta al menos una vez en su vida. Más de la mitad de los encuestados (56%) reconoce estar muy preocupado por la posibilidad de que piratas informáticos obtengan acceso a sus datos personales.

Unos sencillos pasos y apenas unos minutos pueden servir para hacerte invulnerable y ahorrarte más de un disgusto. Los bancos son, probablemente, las entidades que más preparadas están para combatir el hackeo online. Banco Santander, con más de 144 millones de clientes que proteger, propone cinco consejos que garantizan un perfil seguro:

1.-Utiliza una contraseña potente y activa el doble factor de autenticación: Es aconsejable usar contraseñas que contengan mayúsculas, minúsculas, símbolos y números con una longitud larga: más de 12 carácteres.Intenta que la contraseña no contenga palabras del diccionario que puedan ser fácilmente detectables por robots que consiguen obtener las contraseñas mediante técnicas de fuerza bruta. Es muy recomendable poner como contraseña una frase de al menos de 3 palabras para que sea robusta. Romper una contraseña del tipo “abc123” puede llevar apenas un milisegundo, mientras que para algo tan sencillo como “Meencantatomarte4vecesaldia” se necesitarían trillones de siglos. Otro paso adicional y muy recomendable es la activación de la autenticación en dos pasos o de doble factor, de modo que tras introducir tu contraseña recibirás un SMS u otro sistema de autenticación para verificar que es tu cuenta.

2.-Configura la privacidad de todas tus redes. Configurar adecuadamente las opciones de nuestro perfil nos puede ayudar a que solo puedan ver nuestras publicaciones o nuestros datos las personas que nosotros deseemos. De esta forma minimizamos considerablemente el riesgo de exposición de la información y que terceras personas puedan hacer un uso indebido de nuestra información.

3.-Controla lo que publicas. Aunque parece una cosa de sentido común, no todo el mundo lo aplica en las redes sociales. Tenemos que ser conscientes y tener cuidado con lo que publicamos. Si damos demasiada información puede ser utilizado por terceros, por ejemplo, para realizar robos en nuestra vivienda, aprovechando que saben que no estamos en casa. Además, muchas empresas a la hora de contratar a un candidato analizan sus redes socialesy pueden obtener información de su vida personal, opiniones políticas, ritmo de vida… lo que pensamos que solo ven nuestros amigos, pueden estar viéndolo nuestros futuros jefes y poder dañar nuestra reputación.No hay que olvidar que cualquier información que subamos a una red social, perdemos el control sobre la misma. Ya podemos borrarlo o solicitar a la red social que elimine nuestra información, que siempre quedará rastro en internet, o cualquier persona que haya podido verla pueda usarla para difundirla.

4.-Extrema la precaución con los sorteos atractivos y con los enlaces sospechosos. ¿Quién no ha recibido alguna vez en Facebook el mítico timo del sorteo de 150 tarjetas de regalo de una marca de ropa con 500€ de saldo? Este timo en el que mucha gente picó porque lo veía muy atractivo. Cualquier sorteo u oferta en la que pensemos “esto es imposible que sea verdad” tiene que ser suficiente para no pinchar y no caer en la trampa.Muchos de estos enlaces al pinchar sobre ellos pueden traer como consecuencia la instalación silenciosa de unmalware en nuestro ordenador que afecte al rendimiento del mismo.

5.-Protege tu identidad digital. Vigila la suplantación. ¿No os ha pasado ir a buscar en Instagram el perfil de un cantante o actriz y ver que existen 4 o 5 perfiles prácticamente iguales? Incluso algunos de estos perfiles con miles de followers. Pues no es que el famoso se haya vuelto loco y tenga varios perfiles, sino que alguna persona se está aprovechando de su imagen y está consiguiendo seguidores a su costa, pudiendo utilizar dicha cuenta para actos ilícitos u obtener un beneficio a su costa. Incluso en muchas ocasiones se han producido robos o suplantaciones de identidad, en el que un ladrón cibernético puede hacer actos delictivos haciéndose pasar por otra persona pidiendo donaciones o ingresos en alguna cuenta bancaria para un evento. Este acto está tipificado como delito en el Código penal y debemos denunciarlo a la Policía o Guardia Civil.

Banco Santander también ofrece un test de evaluación online en el que podrás conocer, a través de quince preguntas, tu cociente de seguridad online. Las respuestas revelarán si eres lo más parecido a un hombre de las cavernas, un hipster digital pero con ciertas carencias o un superhéroe que lo sabe todo. El objetivo del la entidad es concienciar a los clientes bancarios de la importancia de protegerse en Internet, que conozcan las amenazas más corrientes y enseñar cómo huir de las malas prácticas que ponen en peligro nuestra seguridad en el ciberespacio.

España es uno de los países con mayor penetración de Internet, por delante de potencias tecnológicas como Japón, Alemania o Francia. En concreto, figura en el 5º puesto de la Unión Europea y el 8º del mundo, según el Inclusive Internet Index de 2019, elaborado por la revista The Economist y la red social Facebook. Dentro de este ranking, es el primer país europeo en cuanto a capacidad (habilidades, aceptación cultural y políticas de fomento de internet) y el segundo en cuanto a calidad y amplitud de las infraestructuras.

Por tanto, no es de extrañar que sea también sea uno de los países que más se preocupa por la ciberseguridad. El Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) advierte de que el 95% de los ciberataques están producidos por fallos humanos, por lo que todos somos víctimas potenciales.