Señales de la necesidad de cambio de turbo en un automóvil

Entre los elementos fundamentales pero el correcto fundamentales para el correcto funcionamiento de un vehículo se encuentra el turbo, una pieza que garantiza que la máquina se mueva en condiciones normales sin que sufra ningún problema.

En este sentido, www.reparacionturbo.es señala algunas de las señales que pueden hacer pensar a todo propietario que es posible que tenga que hacer un cambio en esa estructura del vehículo:

  • Una pérdida de potencia es un claro síntoma de un fallo en el turbo, que está pidiendo a gritos una reparación o sustitución por una nueva unidad.
  • Asociado a esta peculiaridad, puede verse como una clara señal de falta de energía en el turbo los conocidos como “tirones”. Lo más frecuente que explica este rendimiento inferior es que la válvula de descarga del turbo está sufriendo algún problema.
  • A veces, el coche intenta transmitir lo que le ocurre en forma de silbidos que pueden hacer alertar al conductor de que algo ocurre en el interior de su máquina rodante. Un ruido anormal que proviene de la zona del motor puede ser un grito de auxilio del vehículo por la previsión de fallo en alguno de sus componentes, en este caso, con mucha probabilidad, en el manguito del turbocompresor, que haya perdido presión o haya sufrido alguna fisura.
  • Si el usuario comprueba que el consumo de aceite ha aumentado de forma repentina, puede hacerse a la idea de que el turbocompresor está en problemas, ya que este componente está estrechamente ligado con el consumo de aceite. Un problema en el eje de la turbina del turbocompresor puede provocar que el aceite se queme en exceso y, por tanto, su consumo sea excesivo.
  • Una consecuencia de lo anterior es la emisión de gases con unas tonalidades azuladas, los cuales son el resultado de que el aceite se haya quemado en el interior del motor, por lo que se genera estos gases a través del tubo de escape que tienen un olor peculiar y que dan fe de un más que posible fallo en el turbo.

Estas son algunas de las señales más frecuentes que revelan un problema en el turbo del automóvil, por lo que es fundamental que se tengan en cuenta para garantizar un estado óptimo del mismo.

 

Consejos para mantener un turbo en buen estado

 

A continuación se ofrecen varios consejos para que la vida útil del turbo sea lo más duradera posible:

  • Aceite de primera calidad: se trata de una de las recomendaciones más importantes porque recurrir a aceites de precios reducidos puede redundar en una rotura prematura del turbo.
  • No hay que pisar el acelerador demasiado hasta que la temperatura del aceite no haya alcanzado la temperatura adecuada.
  • Antes de arrancar el coche, es conveniente esperar dos minutos, equilibrando la temperatura del turbo durante todo el tiempo de uso del vehículo.

En definitiva, existen algunas medidas que parecen insignificantes pero que pueden ser fundamentales para garantizar el mejor estado de salud del turbo y, a la larga, para todo el automóvil.