Desde mediados del mes de octubre estamos en plena campaña de vacunación de la gripe. Y este año, con la crisis sanitaria generada por la pandemia del coronavirus de por medio, la campaña es más apremiante que nunca. A finales del mes de septiembre, el presidente del Gobierno Pedro Sánchez animó a la población a participar de forma activa y a comprometerse con la campaña de vacunación contra la gripe.
“Va a ayudarnos a protegernos del virus, y además, va a ayudar y mucho a los profesionales sanitarios”, decía Sánchez. De hecho, las autoridades sanitarias han hecho este año una compra de dosis extra de la vacuna para que se la pueda poner un porcentaje mayor de la población. Pero, ¿qué hacer si queremos ponernos la vacuna?, ¿dónde nos la pueden dar?, ¿hay que pagar por ella?
1Grupos de riesgo y preferencia
Hay una serie de grupos sociales que, por edad, historial médico o profesión, tienen preferencia para ponerse la vacuna contra la gripe. En años anteriores esos grupos incluían a personas mayores de 65 años, profesionales sanitarios, embarazadas o personas con enfermedades crónicas. Esta temporada, en cambio, se han incluido nuevos grupos de población en esta categoría de referencia.
Ahora, además de los ya citados, tienen preferencia para vacunarse los niños y adultos con diabetes, obesidad mórbida, enfermedad renal crónica, anemias y hemofilia, asplenia, enfermedad hepática crónica, enfermedades neuromusculares, inmunosupresión, cáncer, enfermedad celíaca, enfermedad inflamatoria crónica o síndrome de Down; menores entre 6 meses y 18 años que reciben tratamiento prolongado con ácido acetilsalicílico; personal de geriátricos y cuidadores a domicilio; trabajadores de servicios públicos como bomberos, fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, protección civil, personal de emergencias sanitarias o trabajadores de instituciones penitenciarias.
