Comenzamos este artículo diciendo algo que por obvio, quizás muchas veces pasamos por alto y es que hay que hacer un uso racional y controlado de cualquier medicamento ya que estos siempre tienen efectos secundarios. Además, no debemos automedicarnos, debemos seguir las instrucciones de nuestro médico o farmacéutico. La aspirina y el paracetamol son dos de los analgésicos, junto con el ibuprofeno, más tomados a día de hoy a lo largo de la geografía mundial.
En España podemos comprar ambos sin receta en la farmacia. Son paliativos para el dolor de cabeza, los dolores menstruales, los dolores musculares y los estados febriles leves, entre otros.
Qué es el paracetamol
El paracetamol también es llamado acetaminofén es un fármaco que tiene propiedades analgésicas y antipiréticas. Por tanto, se emplea para tratar todo tipo de dolores de cabeza, musculares, crónicos y para bajar la fiebre.
El paracetamol actúa aliviando la capacidad del cerebro para sentir dolor, pero al no ser un antiinflamatorio no trata al área dañada. El paracetamol tarda entre 45 minutos y una hora en hacer efecto
Ventajas del uso del paracetamol
Se trata de un medicamento que no afecta al estómago. De hecho, es uno de los fármacos más recomendados porque apenas causa reacciones adversas, siempre que se utilice a corto plazo y en las dosis adecuadas. Como ejemplo de ello, el uso del paracetamol está permitido durante la lactancia y embarazo.
Podemos encontrar este medicamento en múltiples formatos, desde comprimidos efervescentes o bucodispersables, cápsulas y sobres, así como supositorios (especialmente para los niños) y solución oral, lo que hace que se pueda adaptar a las necesidades del paciente. Esto es importante para conseguir el cumplimiento del tratamiento.
Dosificación del paracetamol
El paracetamol se recomienda para el tratamiento de las enfermedades que cursan con fiebre o dolor que se mueva entre una intensidad leve y moderada, tanto para adultos como para niños.
El paracetamol también se receta en diferentes dosis, lo podemos encontrar en dosis de 325 mg, de 500 mg, de 650 mg y de 1 gramo, este último se vende solo con receta médica. Siempre se debe administrar a cada paciente la dosis mínima que resulte eficaz para conseguir el efecto que se requiere. En los adultos la posología habitual suele ser entre los 500 y los 1000 miligramos cada 6 u 8 horas, en función de la intensidad de los síntomas.
Los expertos recomiendan tomarlo sin alimentos con un vaso de agua, para conseguir una alivio más rápido del dolor, ya que los alimentos pueden interferir en el tiempo de absorción.
Contraindicaciones del paracetamol
Como decimos el paracetamol es un fármaco bastante seguro, pero hay situaciones en las que debemos tener cuidado. Su uso prolongado en dosis altas puede producir nefropatía intersticial, es decir ,problemas de inflamación en los riñones. En los niños es importante que el profesional adapte la dosis a su tamaño y edad, mientras que en los adultos no se recomienda pasar nunca de los 4 gramos diarios.
También se deben evitar tratamientos prolongados en pacientes con anemia, afecciones cardíacas o pulmonares y en pacientes con disfunción renal grave.
En los pacientes con problemas de alcoholismo, el paracetamol puede provocar daño hepático,no se recomienda más de 2 gramos al día en pacientes alcohólicos. También se debe recetar con precaución en los pacientes asmáticos que sean sensibles al ácido acetilsalicílico
Qué es la aspirina y para qué se emplea
La aspirina o ácido acetilsalicílico, es un antiinflamatorio no esteroideo que está indicado para tratar el dolor, la fiebre y la inflamación.
Pero a diferencia del paracetamol puede causar problemas de estómago.
La aspirina se prescribe para aliviar los síntomas de la artritis reumatoide, osteoartritis, lupus eritematoso sistémico, y ciertos otros trastornos reumatológicos. Sin prescripción la aspirina es utilizada para bajar la fiebre y aliviar el dolor leve a moderado, como el dolor de cabeza, el dolor de los períodos menstruales, la artritis, los resfriados, los dolores de muelas, dolores musculares, etc.
También se emplea en las personas que tuvieron un ataque cardíaco y para prevenir los accidentes cerebrovasculares isquémicos.
La aspirina pertenece al grupo de los medicamentos llamados salicilatos.
La aspirina prescrita viene en un formato de tabletas de liberación lenta. Pero sin prescripción puede venir en forma de tabletas regulares, tabletas de liberación retardada, tabletas masticables, etc.
Cómo actúa la aspirina
La aspirina es un agente antiplaquetario, lo que significa que impide que las células sanguíneas llamadas plaquetas se adhieran a otras y formen coágulos. Por eso se indica para los pacientes que se están restableciendo de haber sufrido un ataque cardíaco. evitando así que se formen coágulos sanguíneos en las arterias coronarias. La aspirina también reduce las sustancias del organismo que causan dolor e inflamación.
La cantidad de aspirina que se puede tomar, varía en función de los tipos y de las patologías. Debemos atender siempre a los criterios que nos indique nuestro médico o farmacéutico.
Contraindicaciones de la aspirina
Hay ciertos medicamentos que pueden interferir en el efecto de la aspirina, es importante que cuando se vaya a tomar se le comunique al médico todo lo que está tomando.
Mientras se toma la aspirina se debe evitar tomar bebidas alcohólicas, ya que podrían dañar seriamente el estómago.
También se debe tener presente que la aspirina puede reducir la capacidad de coagulación de la sangre, por lo que en caso de tener que hacer un procedimiento quirúrgico o dental habría que avisar también a los profesionales.
Además, hay personas que son alérgicas a la aspirina. La aspirina puede causar efectos secundarios, los más comunes son la acidez o el malestar estomacal y los zumbidos en los oídos. Otros efectos secundarios menos comunes son la reacción alérgica, vómitos retortijones abdominales, materia fecal oscura, fiebre o confusión.
1Aspirina o paracetamol, ¿cuál tomar?
En definitiva, no se trata de saber cuál de los dos medicamentos es más efectivo, sino de valorar la sintomatología y determinar cuál es más efectivo para cada caso. La aspirina une a sus cualidades analgésicas y antipiréticas las de ser antiinflamatorio y descoagulante.
