El mundo está muy mal repartido, puesto que lo que más bueno está, siempre engorda y es malo para la salud. En cambio, lo saludable como las acelgas, tienen un sabor que da pena solo de pensarlo. Por suerte, a día de hoy hay una gran cantidad de recetas de nuestras comidas favoritas, pero sanas, y eso es lo que vamos a aprender a hacer hoy, gominolas sin azúcar.
Dejando de lado todas las contraindicaciones que tienen estos pequeños dulces en nuestra salud, ya que tienen una gran cantidad de azúcar y demás añadidos, lo cierto es que no sabemos a la perfección de qué están hechas. Ex trabajadores de fábricas de gominolas nos han contado historias para no dormir sobre sus ingredientes, y es por ello que hoy vamos a enseñarte a hacer tus propias gominolas, para ti y los más pequeños.
Tener una buena alimentación es muy importante, desde pequeño hay que aprender a diferenciar lo bueno de lo malo, ¿pero quién le niega a esas caritas inocentes una gominola? Bueno, pues no tendrás que pasar por ese mal trago, ya que las puedes hacer tú mismo, y de paso, enseñarle a hacerlo para que tenga más interés, y las disfrute aún más.
Los más jóvenes, amantes de las gominolas
Seguramente, cuando eras un niño disfrutabas inmensamente de las gominolas. Eran ese dulce ideal que nuestros padres y abuelos nos compraban en muchas ocasiones por habernos portado bien, o simplemente como regalo al recogernos del colegio. Claro que por aquel entonces corríamos como condenados cada tarde en el parque, y quemábamos todo lo que nos echábamos a la boca.
Pero los tiempos cambian, estos dulces cada vez son de peor calidad, incluyen más aditivos e ingredientes que preferimos no conocer. Y eso no es lo peor, en la era de la tecnología y el miedo, los niños ya no salen a la calle a jugar al fútbol con los amigos ni nada parecido. Puede que alguna vez al parque, pero las cosas ya no son lo que eran. Así que si unimos el consumo de gominolas al poco movimiento de estos niños pegados a la pantalla, tenemos como resultado obesidad y mala salud como consecuencia. Razón de más para que aprendamos a hacer unas buenas gominolas sin azúcar, y si ellos colaboran en la elaboración, mejor.
¿Quiénes pueden comer estas gominolas?
¡Todos! cualquiera puede disfrutar de este rico dulce casero, eso sí, procura no utilizar ingredientes a los que seas alérgico. Por ejemplo, si ves que en nuestra receta usamos fresas, y eres alérgico a ellas, elige otra opción de fruta, mientras que utilices las mismas cantidades, no habrá ningún problema.
Los primeros que vana desear comer estas gominolas son los más pequeños, y es probable que le gusten más que las de la tienda. Pero hay ciertas personas que se alegrarán mucho de aprender esta receta, los diabéticos. Sí, estas personas podrán comer estas gomitas sin preocuparse, están ricas y no les causarán ningún daño.
¿Se pueden comer si estás a dieta?
Si las consumes con moderación, por supuesto que se pueden comer. A dieta, tanto los alimentos indicados por tu nutricionista como estas gominolas sin azúcar se pueden comer en su justa medida. Nada en exceso es bueno, y aunque estas gomitas no tienen azúcar procesado, sí tienen el de la fruta, que aunque es menos dañino, al fin y al cabo, tiene sus calorías.
Así que si tenemos en cuenta que lo que estás consumiendo es fruta, sí, puedes incluirlas en tu dieta. Además, para esas personas que tienen problemas para comer fruta cada día, esta es una muy buena opción, ya que seguro que no te olvidas de comer estos dulces.
Gominolas de fresa sin azúcar
De todas las opciones que tienes a tu disposición para hacer gominolas sin azúcar, la que nosotros te proponemos en primer lugar es con fresas. Son las más dulces, y tienen un sabor muy intenso.
Como te hemos dicho, si tienes alergia a las fresas, elige otra que te guste para hacer la elaboración. Lo más importante es que utilices las mismas proporciones que te vamos a indicar, de lo contrario, no lograrás hacer este dulce casero.
Los ingredientes que vas a necesitar
La receta en sí es muy fácil y los ingredientes aún más fáciles de conseguir. Puede que de pequeño tus padres te regalaran un juego para hacer gominolas, en el cual tenías que mezclar unos polvos que venían en la caja y mezclarlos con agua. El problema es que ni sabías qué eran esos polvos, ni estaban buenas. Pero ahora, vas a hacer las tuyas con completa conciencia de qué es lo que te vas a comer tú y los pequeños de la casa.
Los ingredientes que vas a necesitar son: una taza de fresas trituradas, una taza siempre equivale a 250 ml, el zumo de un limón, endulzante al gusto, puedes usar miel o estevia, y tres cucharadas de gelatina sin sabor. Esta la podrás encontrar fácilmente en supermercados como Mercadona y demás.
Primera parte de la receta para gominolas sin azúcar
En primer lugar, debes lavar muy bien las fresas, quitarles su rabillo y cortarlas por la mitad. Como ya te habíamos dicho, puedes cambiar de fruta si lo prefieres. Lo mejor es elegir alguna que tenga un sabor y color intenso, así tendrás un mejor resultado en tus gominolas.
Ahora debes batir las fresas hasta obtener un puré y entonces rellenar una taza con estas. Ahora tienes dos opciones, eliminar la pulpa de la fresa para que las gominolas queden totalmente lisas, o no. De no hacerlo, el sabor será mucho más intenso. Ahora añade endulzante al gusto y una cucharada del zumo de limón, y vuelve a pasar por la batidora.
Como recomendación, sé cauto a la hora de añadir el endulzante, pues si te pasas estarán tan dulces que no habrá niño que las quiera comer. Añade poco a poco y prueba cómo va quedando hasta obtener el resultado que más te agrade.
Segunda y última parte de la receta
Ahora que tienes la fruta endulzada y bien batida, llega el momento de añadir la gelatina sin sabor y volver a revolver con una cuchara hasta que quede completamente integrada. Te recomendamos usar en polvo para que sea más sencillo. Si usas hojas de gelatina es probable que te quedes corto o te pases.
Pon esta mezcla en una olla con anti-adherente a fuego muy bajo y revuelve sin parar hasta que empiece a hervir. Es muy importante que no dejes de remover, pues podrían quedar grumos en la mezcla. Verás que a medida que se va calentando, la mezcla se pone más líquida. Esto es buena señal, al empezar a hervir, quita la olla del fuego y reparte toda la mezcla en una cubitera. Hazlo mientras la mezcla está caliente, y ahora reserva hasta que alcance temperatura ambiente.
Una vez haya enfriado, lleva tu cubitera a la nevera durante una o dos horas y listo. Ya podéis disfrutar en familia de unas ricas gominolas y sin azúcar. Como apunte final, decirte que las frutas tropicales como el kiwi o la piña no se pueden utilizar, ya que su ácido no permite a la gelatina hacer su trabajo.
