Las singularidades de la nueva boutique de Dior en París

Dior acaba de abrir su nueva boutique en París. Lo ha hecho en los Campos Elíseos, que es la principal avenida de la capital de Francia. Esta boutique, que será una de las favoritas de algunas celebridades, surge como gemela de la famosa tienda en la Avenida Montaigne y repite su fachada, aunque en esta ocasión se añade una gran cortina hecha a mano.

Se distribuye en tres pisos que culminan en una cúpula luminosa de grandes proporciones, y la tienda alberga varios universos a los que se puede acceder mediante una gran puerta de cristal que lleva a una escalera de caracol escultórica. Con esta inauguración y sus peculiaridades, Dior nos sorprende una vez más (si te encanta esta marca, recuerda que Sauvage es lo nuevo de Dior).

 

Una mezcla entre presente y pasado

Aunque los códigos de Dior han sido sometidos a reinterpretación continuamente, por cada uno de los sucesores de la firma, aún quedan resquicios de lo que un día fue, por lo que la nueva boutique es atemporal al mismo tiempo que contemporánea. Como homenaje a la primera tienda de la marca, en la Avenida Montaigne número 30, las paredes lucen recubiertas con la tela de Jouy que eligiera en su día el diseñador Victor Grandpierre por consejo del artista Christian Bérard.

Se pueden encontrar muchos guiños a la historia de la Maison francesa, destacando también la recuperación de algunas prendas blancas que habían permanecido guardadas en el secreto de la Avenida Montaigne, y que reaparecen ahora en los Campos Elíseos colocadas como fresco en una de las paredes de la tienda nueva.

El “cannage”, presente en la nueva boutique

Este espacio está decorado también con el icónico “cannage”, una oda a las sillas de rejilla de estilo Napoleón III que Christian Dior utilizaba en sus desfiles. El mobiliario corre a cargo de los diseñadores Paolo Castelli, Osanna Visconti di Modrone, Philippe Malouin, Dimore Studio y Ramy Fischler, quienes aportan a la compañía trabajos originales procedentes de las galerías Negropontes y Nilufar.

Los visitantes pasan por un parquet tipo de Versalles rehecho en hormigón pulido, pudiendo comprar las colecciones “ready-to-wear” y accesorios de mujer y de hombre, y también joyas y perfumes. En la planta baja hay un auténtico paraíso para los amantes de los zapatos.

Las nuevas tecnologías van de la mano del saber hacer único de Dior

Sin duda alguna, esta nueva tienda de Dior se ha concebido en sí misma como una experiencia, proponiendo un tipo nuevo de lujo en el que las nuevas tecnologías y un saber hacer único van de la mano. Los nuevos servicios de personalización (impresiones, bordados y estampados) destacan especialmente, y están presentes a modo de taller en la boutique. Estos arreglos podrán estar hechos en un tiempo máximo de una hora.

Durante el transcurso de las distintas temporadas, la tienda se irá preparando con nuevos lanzamientos, lo que incluirá ediciones exclusivas y otras sorpresas. Y como no podía ser de otra manera, la encargada de abrir el baile es Maria Grazia Chiurri, la Directora Artística de Dior.