Talleres Conforauto, la confianza necesaria para el mantenimiento de tu moto

La seguridad de los motoristas depende en gran medida del mantenimiento y cuidados que reciba la moto cuando visita al taller. Los talleres Confortauto representan la máxima garantía en este sentido

Los talleres Confortauto se han posicionado rápidamente a lo largo y ancho de la península como el lugar de confianza para poner la moto a punto. Algo que queda demostrado con la rápida expansión que están logrando, ya que en la actualidad existen más de 700 de estos talleres repartidos entre España y Portugal. Es ahora, con la llegada del invierno y sus duras condiciones para el buen funcionamiento de las motos el mejor momento para acercarse a una de las franquicias de Confortauto y comprobar su eficacia, profesionalidad y precio sin competencia.

Talleres Confortauto, todo lo que debe ofrecer un taller para motos

La calidad en los trabajos que ofrece los talleres Confortauto los han colocado como líderes absolutos en venta de productos para la moto, así como para su correcto mantenimiento. Los talleres de la competencia y puntos de venta especializados lo toman como referencia, ellos son los que marcan el camino a seguir en la forma de hacer las cosas en este sector.

Por lo tanto, ahora que se entra de lleno en los fríos invernales, es el momento ideal para llevar la moto y hacerle una revisión completa en el Taller más cercano de esta prestigiosa marca. Principalmente, la visita debería ser para renovar los neumáticos, ya que son los elementos más importantes en relación a la seguridad del motorista y, aquí, en estos talleres, se localiza la mayor variedad y la mejor relación calidad precio del mercado.

¿Cuándo llevar la moto al taller?

Además de las visitas obligadas por rotura o desgaste que pueda sufrir por su uso, las motos no se diferencian de los coches en relación a las revisiones mecánicas y periódicas por las que tiene que pasar para que garantice una correcta conducción. Algunas de estas revisiones son de obligado cumplimiento según marca la ley, otras solo son recomendables para que la moto se mantenga en buen estado, se eviten averías y pueda circular en óptimas condiciones.

Las visitas al taller deben llevarse a cabo siempre que sea preciso, no solo para evitar accidentes, multas o prolongar la vida de este vehículo, sino también para tener una repercusión positiva en las primas de los seguros de moto contratados. Además, al contrario de lo que en un principio se pudiera suponer, estas revisiones no tienen por qué suponer un desembolso elevado de dinero. Confortauto es ese Taller barato que ofrece la máxima calidad en sus trabajos, pero que optimiza sus procesos de tal manera que puede ofrecer los mejores precios del mercado.

Se toma, por tanto, por este y otros motivos como el modelo a seguir, como el taller que sí tiene todo lo que debe ofrecer un negocio de este tipo.

Estas son las revisiones que debe pasar una moto y, por tanto, las que debe ofrecer un taller.

Mantenimiento periódico según el fabricante

Es fundamental seguir al máximo las indicaciones que el fabricante de la moto exige. Es la manera más eficaz de mantener una moto en las mejores condiciones posibles, ya que nadie mejor que la empresa que diseñó y construyó la máquina para saber cómo cuidarla.

Al recibir la moto, el propietario debe recibir el programa de mantenimiento aconsejado por el fabricante. Es el libro donde aparecerán las revisiones periódicas necesarias para prevenir las posibles roturas y fallos que pudieran derivar en algún tipo de accidente. Hay que seguir las instrucciones de este librito lo más ajustadamente posible.

La revisión obligatoria

Al igual que ocurre con los coches, las motos deberán pasar por una primera revisión técnica de carácter obligatorio cuando pasen cuatro años. Posteriormente, esta revisión, conocida como ITV, irá acortándose en periodicidad. Los mecánicos de Confortauto saben exactamente dónde focalizar su trabajo, las partes más importantes para que pase sin problemas este examen.

El trabajo de estos especialistas se centrará en las partes relacionadas con la seguridad en marcha (frenos, luces, amortiguadores, dirección…), así como en que las emisiones de gases se mantengan dentro de lo que autoriza la ley y que las piezas que se hayan sustituido estén homologadas.

Inspecciones regulares y voluntarias

De todas las revisiones, posiblemente, la que más importancia tenga para la seguridad del motociclista y la de los demás usuarios de la vía sea la que se hace de forma voluntaria y con regularidad. Esto significa que el propietario de la moto está atento a cualquier cambio o pequeña diferencia en su funcionamiento, que se preocupa por mantener a la máquina en las mejores condiciones para circular y disfrutar de ella sin temor a un posible accidente.

El oído y el tacto juegan en este sentido un papel fundamental. Solo el piloto de la moto que está atento sabe cuándo algo no funciona bien, y solo el piloto responsable la lleva al taller para eliminar cualquier duda.

Por otra parte, hay que realizar pruebas para asegurarse de que la moto se encuentra en buen estado, accionando los frenos, las luces, los amortiguadores y comprobando que todo funciona a la perfección.