La confianza de los inversores españoles cae a mínimos de 2013

La confianza del pequeño inversor español cayó en el tercer trimestre a mínimos de diciembre de 2013 por la crisis sanitaria y económica desencadenada por el coronavirus, según el índice de confianza de los inversores que elabora la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) a partir de entrevistas telefónicas a sus socios con perfil inversor.

El pesimismo de los inversores en el tercer trimestre de cara a los próximos meses es incluso mayor al que mostraron entre abril y junio, en pleno confinamiento por la pandemia, al registrar todos los indicadores que componen el índice valores inferiores a 100.

El índice se construye con una escala que va de 0 (máxima desconfianza) a 200 (confianza total). El punto medio, 100, da una idea de estabilidad y marca la diferencia entre estar dispuesto a aumentar las inversiones (más de 100) o a reducirlas (menos de 100).

Así, el pequeño inversor español prevé que sus finanzas personales se vean mermadas durante los próximos doce meses e incluso el 45% de los encuestados cree que sus ingresos disminuirán.

«Los rebrotes del coronavirus en nuestro país, o la segunda ola de la pandemia para muchos, y sus devastadoras consecuencias, tanto en el ámbito sanitario como en el económico y financiero, no contribuyen desde luego a que se vaya diluyendo esa enorme dosis de incertidumbre reinante en la actualidad», advierte la OCU.

Ante este panorama, el indicador relativo a las inversiones se situó en el tercer trimestre por debajo de 100, aunque dos de cada tres encuestados por la OCU asegura que hará un esfuerzo por mantener sus inversiones actuales.

No obstante, sólo el 19% piensa que podrán dedicar dinero a nuevas inversiones (9% en el trimestre anterior) y optan preferentemente por las acciones. En cambio, las obligaciones se mantienen en terreno negativo, lo que la OCU atribuye a los rendimientos negativos que están ofreciendo los títulos del Tesoro.

En cuanto a las perspectivas respecto a los inmuebles, el índice se acerca al mínimo histórico que marcó en marzo de 2013 (79 puntos), «en lo más profundo de la crisis que siguió al pinchazo de la burbuja en 2008».