Diego Simeone se hizo viral en las redes sociales luego del empate 2-2 entre el Atlético de Madrid y el FC Barcelona que dirige el polémico Quique Setién.
Asimismo, el encuentro entre colchoneros y culés fue de alta intensidad, entrega, lucha y pasión dentro del campo. Sin embargo, hubo un detalle que, seguramente, manchó tan espléndida jornada. Sí, se trata del ingreso de Antoine Griezmann en el minuto 90′, una total falta de respeto y burla por parte del entrenador del conjunto blaugrana hacia el atacante de 29 años de edad.
El francés entró, realmente, a saludar a sus ex compañeros de equipo, porque tardó más calentando que jugando. Setién con esto sabe que colmó la paciencia del campeón de la Copa del Mundo 2018 de Rusia y ahora tendrá que atenerse a las consecuencias que vendrán por esta mofa que le hizo a «Grizou». Claro está, que el entorno del jugador no se quedará de brazos cruzados, por lo que su hermana y agente, Maud Griezmann, ya solicitó una reunión con los directivos del barça para definir la situación.
La cara del dolor
Aunque lo relevante no es la situación entre el jugador y el entrenador de FC Barcelona, debido a que lo impresionante de todo esto fue el gesto del «Cholo» Simeone, el cual a simple vista muestra la decepción que sintió cuando vio que el francés iba a entrar nada más para ser el acto de burla y una indudable polémica que iría a la primera plana de todos los diarios deportivos del mundo.
Específicamente, en la imagen captada por las cámaras del canal Vamos se puede apreciar en primer plano a Antoine Griezmann con una sonrisa que, tal vez, podría decir: «increíble, ¿de verdad me está haciendo esto?». Y en la parte trasera de la misma se ve la reacción del argentino, quien con las manos en la cintura y mordiéndose los labios por la impotencia tan grande que tendría él en ese momento, miraba a Setién de forma retadora y con un gigantesco toque de lamento por la situación en la que se está viendo inmerso «Grizou».
