El fútbol post pandemia está alegrando a toda la fanaticada y también a muchos jugadores que por fin pueden hacer lo que más les apasiona, aunque sin público por ahora, pero al menos se juega. Además, el hecho de que se juegue cada tres días, aunque sea peligroso por las lesiones y generé un quebradero de cabeza a los entrenadores, les está dando más oportunidades a los futbolistas para que entren en juego. Al menos eso es lo que se puede pensar y más en equipos con gran fondo de armario, pero para Zidane y el Real Madrid esa premisa no cuela mucho, porque son muy pocas las variaciones que aplica el francés.
La alegría también se ve con la nueva regla de los cinco cambios, debido a que son muchos los futbolistas que se han beneficiado, porque están consiguiendo más minutos en campo, y también los entrenadores salen ganando, porque tienen más opciones; la cosa es que con el club merengue parece que esto no aplica, porque la confianza del galo está puesta en solo unos pocos. Mientras que Courtois, Sergio Ramos, Varane, Carvajal, Casemiro y Benzema son innegociables, porque se lo merecen además, otros no cuentan con muchas oportunidades para demostrar su talento.
Pese a que el técnico ha prometido minutos en campo e incluso se ha visto que a varios los ha vuelto a poner en cancha después de mucho tiempo, se nota (y mucho) que con algunos el discurso no se sigue, por lo que continúan más en la penumbra del banquillo que en la luz del césped.
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Bale es la gran incógnita de Zidane
Uno de los ejemplos más claros del ostracismo al que ha relegado Zidane a algunos jugadores es Gareth Bale. El galés le ha tocado ver desde la grada o el banco la mayoría de los partidos tras el retorno a las canchas, solo en uno ha jugado como titular (Mallorca) y en otro entró desde el banco (Eibar), el resto los ha tenido que ver desde el banquillo. En total, solo ha estado en el campo 100 minutos de 540, muy pocos para un jugador de su calibre.
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James Rodríguez
Otro de los que no tienen el beneplácito de del galo ha sido James Rodríguez. El colombiano es quizá, junto al galés, el caso más extraño, porque el técnico elogia su profesionalidad cada vez que puede, pero no le da minutos en campo. De los 540 minutos en este retorno tras el parón solo ha jugado 78’, ante la Real Sociedad que salió de titular, el resto de partidos los ha tenido que ver sentado desde la seguridad de las gradas. Una repetición de lo que ha sido toda la temporada.
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Mariano
Para el hispano-dominicano el guion no ha cambiado. Si en la temporada había contado poco o nada, en este fútbol post pandemia sigue todo igual. En seis partidos Mariano no ha entrado de titular en ninguno y solo ha disputado 21 minutos de los 540 posibles, siendo lo peor esos dos minutos, y en el tiempo añadido, contra el Getafe. Muy pocos minutos para que el delantero pueda demostrarle a Zidane que puede aportar más de lo que cree.
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Brahim Díaz
Con Brahim Díaz las cosas no han mejorado pese a que debería contar con más posibilidades de entrar para así dar descanso a sus compañeros. El malagueño ha entrado en todas las convocatorias en estos seis últimos partidos, pero el francés solo le ha puesto a jugar en uno (ante el Mallorca) y solo siete minutos. El panorama no ha cambiado, porque incluso antes del parón tampoco venía jugando.
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Areola
Como segundo portero es entendible que Alphonse Areola no entre mucho en juego y si en todas las convocatorias. Sin embargo, Zidane suele darles muchas oportunidades a los segundos porteros para que no pierdan ritmo, no solo con la Copa del Rey, también con partidos de Liga. Ya el guardameta francés había estado en tres partidos antes del parón, pero tras la vuelta la actuación de Courtois ha sido tan descomunal que no le ha dejado ninguna posibilidad de entrar en juego.
Solo restan cinco duelos por delante y estos futbolistas, más otros como Militao, Lucas Vázquez o Jovic, tendrán que remar fuerte si es que quieren convencer a su entrenador y tener algunos minutos en este final de temporada.
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