Lionel Messi ya se ha reunido con Koeman. El nuevo entrenador blaugrana no perdió tiempo y pidió encontrarse con su capitán. El argentino accedió y pausó sus vacaciones en los pirineos catalanes para citarse con su director técnico y poner muchas cosas sobre la mesa. En cuanto a la continuidad con el club, el 10 culé fue claro en decir que por ahora no tiene seguridad de quedarse, pero que si están dadas las condiciones lo haría con gusto, pues tiene ADN Barça.
El problema está principalmente es que Koeman llega con la misión de hacer poda y salir de algunos jugadores que no están aportando en lo deportivo y pesan a la hora de pagar los salarios. En dicho encuentro, Messi aprobó la salida de algunos, pero puso sus condiciones por otros. El crack culé pidió la continuidad de 4 piezas, las cuales ve imposible estar en una cancha sin ellos.
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Gerard Piqué
Messi ha sido tajante con el tema Piqué. No quiere que salgan del central. El catalán sido fundamental en los últimos éxitos del club. Está de acuerdo que su amigo y compañero cumpla un rol menos protagónico, pero que no salgan de él. El defensa fue primero en poner su cabeza para la reestructuración, pero en el último proyecto deportivo de “La Pulga” todavía le tienen en cuenta.
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Jordi Alba
Para Messi, Alba solo tuvo una mala temporada. El lateral izquierdo todavía tiene talento para estar en la banda izquierda. Koeman no piensa lo mismo, pero intentará recuperar físicamente al jugador, el cual se vio muy bajo de forma en la pasada temporada. Alba tiene que enfocarse a recuperar la forma, ya que falta menos de un mes para iniciar una nueva temporada.
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Ansu Fati
Para Messi el canterano tiene que ver más minutos para la venidera campaña. En ese aspecto Koeman está de acuerdo y tendrá mayor preponderancia. El argentino ve a Ansu Fati como su sucesor. Por eso quiere que se le lleve poco a poco. La directiva tiene fe con el chaval y esperan que dentro de la era Koeman sean determinante.
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Clement Lenglet
El francés se convirtió en el socio perfecto para Piqué. Su rendimiento fue siempre constante y eso lo convirtió en una fija para Setién. Ahora con Koeman, Messi cree que deberá asumir un rol de más peso, ya que lo más probable se convierta en el jefe de la zaga culé, si al final Piqué vea los partidos desde la banca.
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