Una tumba con 115 cuerpos, en su mayoría niños, ha sido descubierta por arqueólogos en Polonia. Se cree que la fosa pudo ser cavada entre los siglos XVI y XVII.
Los análisis realizados a los restos han determinado que los cuerpos fueron sepultados con monedas en la boca acuñadas entre 1587 y 1632, un práctica habitual en culturas milenarias como la griega y la romana.
«Las monedas se llaman ‘óbolos de los muertos’ u ‘óbolos de Caronte’. Es una antigua tradición precristiana que se ha mantenido durante mucho tiempo”, señaló uno de los responsables de la excavación.
Los antiguos tenían la costumbre de de colocar una moneda, encima o dentro de la boca, como un pago a Caronte, el barquero encargado de transportar las almas al mundo de los muertos.