¡Cuidado! Alimentos que no deberías acercar a un microondas

El microondas es uno de los inventos más útiles que ha realizado la humanidad. Se descubrió allá por la década de los 40 y fue por casualidad. Aunque le llamemos comúnmente microondas, sería más exacto llamarlo horno de microondas. Lo utilizamos a diario o casi a diario para calentar nuestros alimentos, la leche o incluso el agua. Pero hay algunos tipos de comida que no deberíamos calentar con este aparato.

Y es que hay algunas categorías de comida que pueden causar algún accidente dentro del microondas. Este invento surgió de casualidad, como decíamos. En una investigación de un aparato que emitía ondas su inventor descubrió que, debido al campo electromagnético utilizado, una chocolatina que tenía en el bolsillo se había derretido. A modo de experimento colocó algunos alimentos, que acabaron por cocinarse. A esto le colocó una caja de Faraday para evitar las dañinas ondas y hasta hoy. Vamos a ver qué alimentos no deberíamos cocinar dentro de nuestro microondas.

Huevos cocidos

Huevos

Si metes un huevo cocido para calentarlo dentro del microondas lo más normal es que te encuentres una sorpresa cuando abras la puerta. Y la sorpresa no es que salga un pollito, si no que no haya huevo.

Las moléculas de agua que hay dentro del huevo cocido van a empezar a evaporarse tras introducirlo en el microondas y ponerlo a funcionar. Esto va a empezar a generar una presión en el interior del alimento que va a aumentar mucho.

Los huevos cocidos no tienen una gran consistencia, con lo que no van a poder resistir mucha presión. Lo que pasará es que va a haber una explosión dentro del microondas. Esto a priori no es peligroso, pero los restos van a tener una gran temperatura. También puede explotar en el plato al sacarlo o incluso cuando lo vayas a morder.