El secretario general de Salud de la Generalitat, Marc Ramentol, ha asegurado este viernes que su departamento «asistirá de cerca» a los centros educativos en el proceso de automuestras de las pruebas PCR que se realizarán los alumnos a partir de la ESO cuando se detecte un caso positivo de coronavirus en su grupo burbuja.
Lo ha explicado en rueda de prensa junto al coordinador de la unidad de seguimiento del Covid-19 en Catalunya, Jacobo Mendioroz, poco después que el conseller de Educación, Josep Bargalló, afirmara que habrá sanitarios presentes en los centros cuando los alumnos y profesores se hagan las pruebas.
Ramentol ha concretado que este acompañamiento será por profesionales sanitarios, no necesariamente médicos o enfermeras, y ha añadido que estará supeditado a la transición que «requiera el ámbito educativo para tener plena seguridad» en el proceso.
De hecho, esta supervisión está «orientada al desarrollo de la técnica» entre alumnos y profesores a partir de la ESO, mientras que en los ámbitos educativos de Infantil y Primaria se mantendrán los cribados como hasta ahora.
Ha defendido que es una técnica de «realización sencilla», con la introducción del escobillón –dos centímetros– en cada una de las fosas nasales, y que mantiene tanto el mismo proceso de obtención (frotis nasal) como el mismo tipo de prueba (PCR).
Ramentol ha argumentado que, dada la situación actual de mitigación franca –en la que no se puede garantizar la trazabilidad de casos y de sus contactos debido al impacto asistencial– y al aumento de contagios en entornos «mucho más vulnerables», ha obligado a reorientar profesionales para la detección de casos.
Sin embargo, ha reivindicado que para el departamento «es una práctica que tiene un valor importante» por lo que para continuar realizando los cribados en las burbujas han tenido que hacer este cambio organizativo.
