ASAGA Canarias celebra el correcto funcionamiento de los controles a la importación en los puntos de inspección fronterizo

Aclara que la paralización de una partida de papas importada se debe únicamente a la mayor presencia de tierra adherida a la superficie de la permitida

 En la actualidad, la distribución a la que se suministra estas producciones, necesita unos 50.000 kilos de papas al día para abastecer las necesidades de los consumidores, pero las explotaciones locales no cuentan con disponibilidad para atender estas cantidades.

 

         En relación a las informaciones publicadas en algunos medios de comunicación sobre las partidas importadas de papa por la empresa comercializadora de la que es gerente Ángela Delgado, presidenta de la Asociación de Agricultores y Ganaderos de Canarias (ASAGA Canarias ASAJA), esta organización profesional agraria manifiesta su satisfacción por el correcto funcionamiento de los Puntos de Inspección Fronterizo (PIF), lo que demuestra que siguen a rajatabla los controles pertinentes para evitar la introducción de patógenos y proteger la agricultura canaria.

La paralización de esta partida (432.000 kilos) se debió en concreto a la detección de una mayor presencia de tierra adherida a la superficie del tubérculo de la permitida por la normativa fitosanitaria del Archipiélago. Rechazo que Ángela Delgado nunca ha cuestionado al entender que se debe al cumplimiento estricto de las normas de Sanidad Vegetal.

La importación de papa de consumo es una medida recurrente de manera puntual, cuando se produce desabastecimiento del mercado al no existir producciones locales. De esta forma, se puede garantizar el suministro continuo a la distribución, cumpliendo así con los contratos establecidos, ayudando a mantener las rentas de 700 agricultores de la isla y como fórmula para asegurar el mantenimiento de toda la cadena agroalimentaria, desde la siembra hasta la comercialización.

Este año la producción de papa ha experimentado una merma considerable debido a la falta de precipitaciones y las altas temperaturas que se registraron durante el periodo de otoño e invierno así como a los efectos devastadores que provocó el temporal de viento y calima del pasado mes de febrero, en el que el 80% de la papa extratemprana del norte de la isla se perdió completamente, datos avalados por informes técnicos de las administraciones. Paralelamente, en el sur, las condiciones climáticas adversas y la no disponibilidad de agua de riego ha reducido la superficie de siembra propiciando una drástica caída de la cosecha con una merma del 50%. Ahora lo que se está recogiendo es papa para arrugar.

La empresa comercializadora y la Organización de Productores de Frutas y Hortalizas (OPFH), cuya responsable es Ángela Delgado, aglutina a más 700 agricultores de la isla que comercializan sus producciones de papa local a través de estas entidades. Esta relación comercial les ha permitido subsistir y seguir manteniendo su rentabilidad gracias a los contratos establecidos con la gran distribución garantizándoles unos precios fijos durante todo el año por encima de sus costes de producción y sin intermediarios.

Estos acuerdos, resultado de la política empresarial que se aplica, incluyen el abastecimiento de papa importada en aquellos periodos del año de escasez o ausencia de este tubérculo en las explotaciones de la isla. En la actualidad y para que se entienda la dimensión de la demanda actual de este producto, solo contando con las cadenas de supermercados a los que se suministra, necesitan 50.000 kilos de papa al día. Sin embargo, no hay disponibilidad en el mercado local para cubrir este abastecimiento en este mes. Para refrendar esta afirmación, la propia Ángela Delgado contactó recientemente con las cooperativas, OPFH y diferentes organizaciones profesionales agrarias existentes y ninguna podía garantizar el suministro de papa local en estos momentos.

Por otro lado, las cantidades importadas a las que se refiere en concreto el citado artículo, es decir, 432.000 kilos, solo hubieran permitido abastecer a dichas cadenas de supermercados durante un periodo de diez días. De hecho, por desgracia, por los motivos descritos, cualquier consumidor que se acerque ahora a un supermercado podrá comprobar que la oferta de papa de los lineales procede de diferentes orígenes y, prácticamente, no se encuentra papa canaria. Para cuando la recogida de la cosecha de papa local comience, en unas pocas semanas, el consumo de papa importada habrá terminado.

Garantías sanitarias

La empresa comercializadora garantiza que todas las partidas importadas para consumo cumplen con todas las normativas exigidas por la certificación GLOBAL GAP, la más estricta a nivel mundial en seguridad alimentaria que avala su trazabilidad.

Esta organización profesional agraria ha sido conocedora, desde el primer momento en que Ángela Delgado fue nombrada presidenta de ASAGA Canarias ASAJA, de la actividad importadora que realizaba para cubrir los vacíos de producción local puntuales y ella misma siempre se ha mostrado clara y transparente al respecto y lo ha comunicado en diferentes ocasiones delante de los medios. ASAGA Canarias siempre defenderá el control y cumplimiento estricto de toda la normativa que regula las importaciones y no va a permitir de ninguna manera que se ponga en tela de juicio o se insinúe lo contrario.