La inteligencia artificial y la robótica no solo serán los responsables de la última tecnología que puede cambiar por completo el terreno médico, y el siguiente gran cambio tecnológico vendrá de la mano de los neurotransmisores, donde Neuralink es una de las principales empresas que han apostado por este sector.
Sin embargo, la compañía de Elon Musk no es la única que está decidida a apostar con fuerza por los implantes cerebrales y ahora nos encontramos con unos chips que devuelven el habla que avanzan más rápido que la tecnología de Neuralink, pasando así a convertirse en su principal competidor.
NEURALINK TIENE COMPETENCIA
En los últimos años nos hemos encontrado con grandes avances en el terreno de la inteligencia artificial y la robótica, pero uno de los mayores cambios que viviremos de la mano de la tecnología en los próximos años tendrá que ver con los neurotransmirores.
El hecho de poder convertir las señales del cerebro en movimientos y palabras es todo un desafío, y una de las empresas que más han apostado por ello es Neuralink, la compañía de neurotecnología estadounidense fundada por Elon Musk.
Esta empresa se ha esforzado por convertirse en líder mundial en implantes cerebrales, y una prueba de ello es que ya hay un paciente en Europa que ha probado sus chips con éxito. Sin embargo, no está sola en esta carrera, y tiene un duro competidor en Paradromics, la compañía de Matt Angle que se ha convertido en una de las compañías más ambiciosas del sector.
EL COMPETIDOR DE NEURALINK INICIA SUS PRUEBAS EN HUMANOS
Paradromics ha recibido la aprobación para iniciar las pruebas en humanos de su implante conocido como Connexus. Este es un chip diseñado para devolver la capacidad de comunicarse a personas que han perdido el habla como consecuencia de lesiones o enfermedades neurodegenerativas.
A partir de 2026, la competencia de Neuralink empezará a hacer experimentos con dos afectados para poner a prueba un dispositivo que podría cambiar de forma notable su vida, permitiendo que puedan recuperar el habla y comunicarse de nuevo.
Fundada en el año 2015, Paradromics es una compañía que lleva más de una década trabajando con la finalidad de crear una voz fluida y natural para personas con una movilidad extremadamente limitada.
Esta mejora puede llegar a ser un gran avance para enfermos de ELA o lesiones modulares, que gracias a neurotransmisores que actúan mediante ondas cerebrales podrán volver a comunicarse. "Es razonable pensar que alguien podrá comunicarse a 60 palabras por minuto", ha explicado al respecto Matt Angle.
Aunque pueda parecer que el ritmo de habla es lento, ya que el habla natural se encuentra entre las 120 y las 150 palabras por minuto, supone multiplicar por diez la velocidad de comunicación de muchas personas que padecen una discapacidad motora severa.
CÓMO FUNCIONAN LOS CHIPS CEREBRALES QUE COMPITEN CON NEURALINK
Al mismo tiempo que un nuevo implante ocular abre la puerta a que las personas ciegas recuperen la visión, nos encontramos con estos chips cerebrales que pueden marcar un antes y un después, especialmente para personas que tienen problemas para comunicarse.
Aunque se pueda pensar que estos chips cerebrales leen pensamientos, la realidad es que no es así, sino que lo que hacen es leer los patrones neuronales generados cuando una persona trata de mover los músculos que están implicados en el habla.
Dicho de otra forma, cuando el paciente trata de decir una palabra o frase, lo que hace este chip de la competencia de Neuralink es reinterpretarlo a través de sus señales, permitiendo que todo sea más directo y cómodo, facilitando que pueda volver a hablar.
"Estamos pasando de prototipos académicos a desarrollos industriales. Es probable que veamos mejoras tan rápidas como las de cada nuevo lanzamiento del iPhone", advierten desde Paradromics, y esto puede llevar a pensar en el futuro de la tecnología.
Las aplicaciones médicas de los neurotransmisores son más que evidentes, y es posible que en el futuro puedan suponer una gran ayuda en lo que respecta a los avances motores de cualquier persona. De ser así, nos encontraríamos ante una nueva era que sería capaz de desafiar los límites de la ciencia ficción. Lo que está claro es que Neuralink y Paradromics tienen por delante una dura batalla de la que se pueden beneficiar los ciudadanos.
ASÍ ES EL IMPLANTE DEL COMPETIDOR DE NEURALINK
Los chips de Paradromics, como el implante Connexus, son interfaces cerebro-computadora que están especialmente diseñadas para restaurar la comunicación en personas con parálisis recurriendo al uso de microelectrodos que registran la actividad neuronal directamente en el tejido cerebral.
Se basa en un pequeño disco metálico que posee cientos de microelectrodos flexibles, mucho más finos que un cabello humano, y que están fabricados con materiales biocompatibles como platino e iridio, de forma que se reducen las posibilidades de que pueda tener efectos negativos.
Este chip cerebral se introduce en la corteza cerebral a través de un procedimiento mínimamente invasivo, usando un instrumento especializado para colocar las microagujas que registran la actividad neuronal. Como decimos, en este caso no lee pensamientos, sino que descifra las señales motoras que el cerebro genera cuando una persona intenta hablar o moverse, aunque no lo pueda hacer físicamente.
Estas señales son transmitidas a un dispositivo externo, un transceptor inalámbrico que se encuentra en el pecho, y posteriormente son enviadas a una computadora, donde la inteligencia artificial se encarga de interpretarlas y convertirlas en texto o voz sintetizada. De hecho, es capaz incluso de clonar la voz original del paciente, con la ventaja que ello supone.
Su objetivo principal es el de ayudar a personas con ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica), lesiones medulares y accidentes cerebrovasculares, de manera que todos ellos puedan comunicarse de una forma independiente. Supone, por lo tanto, una gran ventaja con respecto a las tecnologías anteriores, superando las limitaciones que muchas de ellas aún tienen hoy en día y que impiden una comunicación fluida. De la mano de Neuralink y Paradromics, nos encontramos ante una nueva era médica.
