Curro y Ángela, alejados del palacio, buscan protegerse de todo el peligro que los acecha en ‘La Promesa', sin embargo, en el capítulo de hoy se librará una batalla cargada de dolor y rabia. Alonso decide ir a ver a su hijo, pero la situación dará un vuelco dramático. Tanto, que Curro acabará apuntándole con un arma al marqués.
Mientras, en el palacio de ‘La Promesa’, en el servicio, la rebelión parece estar a punto de estallar en contra del ama de llaves y del mayordomo, principalmente. Teresa se plantará ante Cristóbal, María Fernández sigue escondiendo su embarazo y la sombra de Lorenzo amenaza con convertir la tragedia en algo aún peor. Si el capítulo especial de Navidad fue el golpe, este lunes es la onda expansiva.
Un enfrentamiento entre padre e hijo en ‘La Promesa’
Curro ha llevado a Ángela a la cabaña para protegerla, para alejarla del palacio y del dolor. Pero ese refugio se ha convertido en una fortaleza bajo asedio. Leocadia estará fuera de sí, exigiendo que su hija vuelva a ‘La Promesa’. Lorenzo, el prometido, ha dejado claro que si va allí, irá armado. Y no para amenazar, sino para eliminar a Curro, a quien ve como el culpable de todo.
En medio de este clima de amenaza, llegará la visita más complicada: Alonso, el padre de Curro. Él irá, seguramente, con la intención de hablar, de tender un puente para llegar a un punto de consenso. Pero lo que se encuentra es a un hijo destrozado, transformado por la rabia y la desesperación. Curro no está en condiciones de recibir visitas. Menos de su verdadero padre. Ángela, que poco a poco va mejorando dentro de la cabaña, observará el desencuentro con pánico. Y entonces ocurrirá. Curro, con el arma en la mano, apunta a Alonso.
Una rebelión silenciosa se está formando en el servicio
Mientras el drama familiar se vive en la cabaña, en el servicio de 'La Promesa' las cosas tampoco pintan bien. La tensión entre Teresa y Cristóbal ha llegado a un límite. El mayordomo decidió castigar a Vera asignándole una tarea durísima y peligrosa: limpiar sola las ventanas del torreón. Un trabajo casi inhumano.
Pero Teresa no se quedará callada. Se saltará la jerarquía y se plantará frente a Cristóbal para recriminarle su decisión. Lo acusará de ser injusto y cruel. Teresa, que hasta ahora había sido la leal ama de llaves, comenzará a ver que el liderazgo de Cristóbal puede ser tan opresivo como el de los señores.
En este mismo lío, María Fernández carga con su secreto. Le confesará a Pía que no quiere revelarle a Carlo que es el padre del bebé que espera. Teme su reacción, sabe que él no está preparado. Pía lo entiende, pero cree que la verdad tarde o temprano saldrá a la luz. Preocupada, Pía se lo contará a Samuel. Él, queriendo ayudar, intercede ante Cristóbal para que contrate a Carlo como nuevo lacayo de ‘La Promesa’. Pero el mayordomo desconfía del muchacho. Sin embargo, este secreto, pronto será descubierto por Carlo.
Arriba, las batallas son distintas pero igual de intensas
Manuel seguirá atrapado en el negocio con don Luis, una losa que le impide avanzar. Enora, le propondrá una salida. Le dirá que, aunque no puedan romper el contrato, nada les impedirá trabajar con otras empresas a la vez. Manuel escuchará, pensativo. ¿Será esta la estrategia para liberarse finalmente de la sombra de don Lisandro?
En otro frente, Margarita y Adriano vivirán un momento de extraña cercanía. Ella, que aún mantiene las defensas altas, se abrirá un poco con el Conde. Le hablará a Adriano con nostalgia de cómo era Martina de bebé. A Adriano le conmueve. Y luego está Martina, atrapada en su propio lío emocional, tomando decisiones ambiguas: cancelará una reunión importante para ir al teatro con Jacobo. Él se mostrará encantado. Lo que no sabe es que Martina actúa más por culpa que por amor.
La amenaza externa es real y muy peligrosa
Leocadia ha perdido los papeles. Quiere a su hija de vuelta en ‘La Promesa’, cueste lo que cueste, incluso si es obligada. En un enfrentamiento con Pía, la compara con Eugenia. Y luego está Lorenzo. El capitán no piensa esperar por Ángela y Curro. Su paciencia se agotó. Le dejará claro a Leocadia que si va a la cabaña, irá armado. Y su intención no es negociar. “Si dispara, no será para asustar, sino para eliminar al que considera su enemigo: Curro”, según adelanta RTVE.
Lo que veremos este lunes es un episodio de transición, pero violenta. Las consecuencias de la tragedia de Ángela se expanden por todos lados. Curro se convierte en un hombre irreconocible, gobernado por la rabia. Alonso descubre que no puede salvar a su hijo. El servicio se divide. Y las amenazas de Lorenzo prometen una nueva escalada de violencia en ‘La Promesa’.
