Malas noticias para los amantes del café, porque el precio no deja de subir y empieza a sentirse en el bolsillo. ¿Has notado que ese café que antes costaba poco más de un euro ahora parece de colección? No es tu imaginación; la OCU confirma que el precio del café se ha disparado un 136% desde 2021, y lo peor es que no parece que vaya a bajar pronto.
Ese pequeño placer diario (el aroma al abrir el paquete, el primer sorbo que te despierta antes del trabajo) se está transformando en un lujo. En algunos bares, el precio del café ya supera los tres euros, y en casa, preparar una taza empieza a sentirse como un gesto premium.
El café se dispara: del desayuno cotidiano al lujo cotidiano

Lo que antes era rutina, hoy se paga como capricho. Según la OCU, un paquete de 250 gramos de este producto molido mezcla ha pasado de costar 1,22 € en 2021 a 2,86 € en 2025, un salto del 136%. Las cápsulas tampoco se salvan, las Dolce Gusto Espresso Intenso han subido un 16,7%, y el Nescafé descafeinado soluble, un 27,7%.
Y no es solo cosa de España, Estados Unidos, Brasil o Vietnam viven una situación parecida. Esta bebida es uno de los productos alimentarios que más se han encarecido en todo el mundo. ¿La razón? Una tormenta perfecta de sequías, aranceles y demanda desbordada.
En España se consumen 67 millones de tazas de este producto al día. De ellas, 22,5 millones se sirven en bares y cafeterías. Imagínate cuánto ha cambiado la factura para los más cafeteros. Así que si quieres ahorrar, prueba el café de marca blanca. La OCU asegura que muchos tienen una calidad similar a las marcas tradicionales… pero a mitad de precio.
¿Por qué ha subido tanto? La culpa no solo es del clima

El principal culpable tiene nombre y apellidos, el cambio climático, un tema que todavía hoy muchos se niegan a aceptar. Sequías extremas en Brasil (que produce el 40% del producto mundial) y Vietnam (el segundo mayor proveedor) han devastado las cosechas. A esto se suman problemas logísticos, falta de mano de obra y nuevos aranceles que han disparado los costes.
Esta bebida, además, cotiza en bolsa, lo que lo convierte en un producto sensible a la especulación. Cuando los grandes fondos compran toneladas de café verde para revenderlo más caro, los precios se disparan en los supermercados.
Y hay un nuevo actor en la historia: China, que ha pasado de consumir 900.000 sacos en 2019 a más de 6,5 millones en 2025. Cuantos más beben este producto en el mundo, más caro se vuelve el tuyo. El precio internacional del café verde subió un 94,6% entre 2024 y 2025, alcanzando su valor más alto en casi 50 años, según la Organización Internacional del Café.
Los expertos recomiendan conservar el café en un envase hermético y en lugar fresco. Así se mantiene el aroma y dura más, evitando que tengas que reponerlo tan rápido (tu bolsillo lo agradecerá), una opción para los amantes del producto, aprovechar los precios bajos del producto, comprar y almacenar para cuando ocurran estas subidas.
Así afecta al bolsillo (y cómo sobrevivir sin renunciar al café)

En casa, el golpe se nota, porque las cantidades ya no son las mismas y en el bolsillo ni se diga. La OCU calcula que la cesta de la compra puede variar hasta 4.270 € al año según el supermercado elegido, y el producto lidera las subidas junto con los plátanos, los limones y los huevos. Comprar en una cadena u otra puede marcar la diferencia entre pagar o no pagar “precio de cafetería” por tu desayuno.
El consumo no se ha desplomado, pero ha cambiado de forma, los españoles se han pasado al producto de distribuidor y han reducido el uso de cápsulas. Aun así, el formato monodosis sigue representando una de cada cinco tazas en los hogares.
El producto molido sale hasta un 60% más barato por taza que el de cápsulas. Si eres de los que toman varias tazas al día, pasarte a una cafetera italiana o de goteo puede ahorrarte más de 200 euros al año. La recomendación de los expertos, sencilla; busca promociones y compra a granel cuando sea posible. Algunas tiendas venden producto recién molido en cantidades personalizadas, más fresco y económico que el envasado.
El nuevo oro marrón (y lo que nos espera)

El café ya no solo nos despierta, también nos alerta, vamos que nos alegra la vida y hasta el momento su precio nos permitía disfrutarlo, sin embargo, los pequeños placeres pueden volverse lujos cuando la economía global se complica. Los expertos coinciden en que los precios podrían estabilizarse, pero difícilmente volverán a los niveles de 2021.
A largo plazo, el futuro del café pasa por la sostenibilidad, y en general y a pesar de que muchos no quieran aceptarlo, un mejor trato del medio ambiente, porque el cambio climático existe y no se detiene, avanza.
Productores en Latinoamérica y África están adoptando cultivos bajo sombra, fertilizantes naturales y certificaciones de comercio justo para mantener la calidad y el equilibrio con el medioambiente. Lo que si es cierto, es que aunque el café se haya encarecido, su papel en nuestras vidas no cambia ni cambiará a largo plazo, sigue siendo ese momento de pausa, conversación y conexión con los que nos rodean. Quizás el precio del café suba, pero su valor emocional sigue intacto.







