La visita de los reyes, Felipe VI y Letizia Ortiz a las áreas devastadas por los incendios forestales en España trascendió el protocolo institucional para convertirse en un acto de profunda humanidad, considerando que los monarcas han interrumpido sus vacaciones de verano para volver al país y hacer frente a la situación que se ha extendido por semanas.
Durante el recorrido por las zonas afectadas de Zamora y León, mantuvieron palabras y gestos de respaldo, especialmente cuando visitaron el emblemático paraje de Las Médulas, se han mostrado consternados por la magnitud de la tragedia, pero también enviaron un mensaje de esperanza hacia la reconstrucción del lugar y su compromiso con los afectos, «hay un halo de esperanza».
3El compromiso de la Casa Real con la recuperación de las zonas afectadas y las personas en situaciones vulnerable

Durante la visita no se limitó solo a la observación de los daños. Felipe VI dejó claro que todavía «hay mucho esfuerzo por hacer» por parte de todas las instituciones del país para «sacar la economía de la zona adelante». Junto a la reina Letizia, se reunió con autoridades locales y con el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, con quienes mantuvo una extensa conversación para conocer datos concretos de la magnitud de lo ocurrido y plantear soluciones.
Este viaje tuvo un doble propósito para Felipe VI y Letizia: conocer de primera mano los daños y las necesidades de las personas afectadas, y mostrar agradecimiento a los equipos de emergencia que han estado abocados en la extinción de los incendios, la recuperación de espacios y la ayuda a los más vulnerables. En el Monasterio de San Martín de Castañeda, mantuvieron un encuentro con residentes desalojados y con representantes de los sectores ganadero, apícola y de restauración. A todos ellos les han transmitido su afecto y solidaridad. Letizia, también se detuvo a conocer de primera mano la historia de las personas afectadas, teniendo especial acercamiento con los niños de San Martín de Castañeda.