La comunidad científica no deja de sorprenderse con hechos y acontecimientos que tienen lugar de una manera inesperada y que, en muchos casos, sirven para abrir nuevas líneas de investigación o poder llegar a conclusiones más certeras, como lo que ha sucedido con un chihuahua.
Los científicos ya estudian el caso de un perro de esta raza que era adicto a la cocaína y cuyo compartimento ante la ingesta de la droga ha permitido dar con un hallazgo asombroso. Los datos recabados podrán servir para poder conocer mejor el impacto que esta tiene sobre los seres vivos.
1UN CHIHUAHUA QUE DESAFÍA LA CIENCIA
Los dueños de animales domésticos son conscientes, al menos de forma general, del peligro que supone para sus mascotas el ingerir sustancias tóxicas. Por este motivo es fundamental la vigilancia constante sobre ellos, aunque en ocasiones no es posible a pesar del esfuerzo, ya que en cualquier momento estos canes pueden llevarse a la boca cualquier sustancia o elemento que no deberían.
Esto es precisamente lo que ha sucedido con un chihuahua, que tuvo que ser llevado por sus dueños a un hospital veterinario tras ingerir una sustancia a la que no está del todo claro cómo pudo acceder. Su caso ha demostrado una vez más la complejidad de este tipo de situaciones, e incluso se ha convertido, por sus características, en un desafío para la ciencia.





