Los agujeros negros son regiones del espacio que poseen una gravedad tan intensa que ni siquiera la luz tiene la capacidad de escapar de ella, y que se forman cuando estrellas masivas colapsan al final de su vida. Se estima que existen 40 trillones de agujeros negros en el universo observable.
Esto supone que pueden darse diferentes situaciones, entre ellas la posibilidad de que estos choquen los unos con los otros, cuando se acercan lo suficiente y sus fuertes campos gravitacionales ocasionan la fusión para formar un agujero negro de mayor tamaño. Ahora, los científicos han detectado la mayor colisión conocida entre dos de ellos.
7UN HITO ENTRE LOS AGUJEROS NEGROS

El mencionado evento GW231123 ha sido histórico, convirtiéndose en todo un hito en la detección de ondas gravitacionales, pero al mismo tiempo ha permitido proporcionar pruebas e información clave para distintas teorías. La interpretación precisa de este tipo de señales complejas implica la necesidad de modelos apropiados para identificarla.
Al girar muy rápidamente estos agujeros negros, cerca del límite permitido por la teoría de la relatividad general de Einstein, la señal es muy difícil de modelar e interpretar. Por lo tanto, es un caso de estudio interesante para impulsar el desarrollo de herramientas teóricas al respecto.