La ciencia no deja de sorprendernos a través de hallazgos que, de una u otra manera, consiguen cambiar el mundo o ampliar los conocimientos que tenemos acerca del planeta en el que habitamos. En algunos casos se llegan a localizar rincones que nunca hubiésemos imaginado.
En esta ocasión, un grupo de investigadores nos ha sorprendido tras hallar un mundo perdido de 34 millones de años que se encuentra enterrado bajo el hielo antártico, un hallazgo que realmente es impresionante y que ha permitido conocer multitud de detalles del planeta mucho tiempo atrás.
4LAS HUELLAS DE UN MUNDO PERDIDO

Entre los restos hallados en este mundo perdido destacan los microfósiles marinos como diatomeas y foraminíferos, unos organismos diminutos que permiten reconstruir cómo eran los océanos en aquella época. También aparecieron restos vegetales y materia orgánica en un estado de conservación asombroso.
Las investigaciones apuntan a que, antes de la gran glaciación, la Antártida contaba con mares cálidos, vegetación abundante y ríos que atravesaban bosques. Este yacimiento es, de esta forma, una ventana al Eoceno, justo antes de que tuviese lugar una de las grandes extinciones del planeta.