Con la llegada del calor, hay cosas que vuelven a nuestras vidas sin pedir permiso: las chancletas, el abanico en el bolso, las siestas improvisadas y, por supuesto, el gazpacho. Este plato veraniego por excelencia, tan andaluz como las ferias de agosto y tan refrescante como un chapuzón a media tarde, se cuela un año más en las neveras de medio país. Y aunque la receta tradicional no tiene grandes misterios, Mercadona ha vuelto a dar con la fórmula que hace que miles de españoles abracen esta sopa fría como si fuese un superalimento.
Hablamos del gazpacho fresco sin pasteurizar y sin pan de Hacendado (marca blanda de Mercadona), una versión moderna y ligera que está arrasando por tercer verano consecutivo. No lleva gluten, ni conservantes, ni colorantes. Y eso lo convierte en el superalimento estrella para quienes buscan salud sin perder sabor.
4Tomate, aceite y ajo, una sinfonía vegetal que alimenta de verdad

Que sea natural no lo convierte automáticamente en saludable. Pero cuando nos fijamos en los ingredientes del gazpacho fresco Hacendado, no hay duda de que estamos ante una fórmula equilibrada y poderosa.
Empezamos por el tomate, base del producto y fuente de las vitaminas antioxidantes A, C y E, además de un buen puñado de vitaminas del grupo B. Su acción es esencial para la salud celular, la regeneración de tejidos y el buen funcionamiento del sistema inmune. Luego está el aceite de oliva virgen extra, con su carga de grasas saludables, propiedades digestivas y su capacidad para regular el colesterol. Si un superalimento lleva aceite de oliva, ya tiene la mitad del camino recorrido.
El pimiento aporta más vitamina C que una naranja, además de betacarotenos y ácidos fenólicos que benefician a la microbiota. El pepino, por su parte, suma vitaminas A, C y K, potasio, magnesio y manganeso, y ayuda a descongestionar y refrescar el organismo en días calurosos. Por último, el ajo completa esta orquesta vegetal con compuestos sulfurados y fructosanas, ideales para mantener en forma nuestra flora intestinal y combatir agentes patógenos de manera natural.