Durante años, Carrefour ha sido uno de los grandes referentes en el consumo cotidiano de los españoles. Pero hay un sector específico en el que, en silencio, ha conseguido posicionarse como un auténtico gigante: el de los productos para el automóvil. No se trata solo de aceites, limpiadores o herramientas. Hablamos de soluciones tecnológicas útiles, eficaces y, sobre todo, accesibles. Y su último éxito de ventas no es una excepción.
Desde hace semanas, el dispositivo que ha acaparado todas las miradas —y carritos de compra— es la We Baliza V16 DGT 3.0, un equipo de señalización de emergencia con geolocalización que será obligatorio por la Dirección General de Tráfico (DGT) a partir de enero de 2026. Su precio ha generado auténtico furor: de costar 143,99 euros ha pasado a solo 55,99 euros.
5Una normativa en evolución que cambiará la forma de señalizar emergencias
La historia de las balizas V16 no comienza con esta nueva ley, sino en julio de 2021, cuando la DGT aprobó su uso como sustituto de los tradicionales triángulos de emergencia. La razón era simple: estas luces no obligan al conductor a salir del coche para señalizar un incidente, lo que reduce enormemente el riesgo de atropello.
Desde entonces, ambos sistemas han coexistido, pero a partir de 2026 solo serán válidas las balizas V16 con geolocalización, como la que Carrefour pone a la venta. Esta medida busca modernizar el sistema de alertas en carretera, haciendo uso de la conectividad para crear un ecosistema de tráfico más eficiente, seguro y controlado.
Sin embargo, no todos los modelos que hoy se ofrecen en el mercado cumplen con los requisitos establecidos por la DGT. Por eso, es fundamental que el usuario verifique que el dispositivo esté homologado, cuente con conectividad y se encuentre registrado en la plataforma DGT 3.0.
