Mantener una buena salud comienza por dentro, aunque muchas veces lo olvidamos cuando compramos alimentos. Y cuando hablamos de salud intestinal, no estamos solo hablando de digestión: también hablamos de defensas, de energía, de bienestar mental y hasta de prevención de enfermedades graves.
Así como existen alimentos que deterioran nuestra microbiota intestinal, también hay cinco tesoros naturales —fáciles de conseguir y aún más fáciles de incorporar— que pueden marcar un antes y un después en nuestra calidad de vida. Y eso, precisamente, es lo que explican los especialistas en nutrición de la Fundación Iberoamericana de Salud Pública (FISP).
1La salud empieza en el intestino: una verdad ancestral que hoy cobra más fuerza que nunca

La medicina moderna confirma una premisa tan antigua como sabia: “la salud comienza en el intestino”. Esta frase, atribuida al mismísimo Hipócrates, se ha convertido en uno de los ejes de trabajo más sólidos dentro del ámbito de la nutrición actual. Y es que no se trata solo de lo que comemos, sino de lo que absorbemos, transformamos y eliminamos.
El intestino es un órgano con funciones cruciales. Además de ser el encargado de procesar y distribuir los nutrientes que ingerimos, es también el hogar de la microbiota intestinal, un ecosistema microscópico conformado por billones de bacterias, virus, hongos y protozoos que viven en armonía —o al menos deberían— dentro de nosotros. Este universo invisible trabaja día y noche para protegernos, regular procesos metabólicos, sintetizar vitaminas y mantenernos a salvo de agentes patógenos. Pero hay un problema: nuestra dieta actual está muy lejos de ser la ideal para ese delicado equilibrio.