En España, encender un cigarrillo al volante no es, por ahora, una infracción como tal. La ley no prohíbe expresamente fumar dentro del coche. Pero eso no significa que estés libre de sanciones. La Dirección General de Tráfico (DGT) puede multarte con hasta 200 euros si detecta que el cigarro compromete tu seguridad o la de los demás.
Porque sí, fumar dentro del vehículo está permitido, pero solo hasta que se convierte en una distracción o un riesgo. Y eso, como veremos, ocurre con más frecuencia de lo que muchos conductores imaginan. La DGT lleva años advirtiéndolo: no es solo una cuestión de libertad personal, sino de responsabilidad vial.
5La advertencia final de la DGT: fumar al volante puede salir muy caro
El mensaje es claro: la DGT no está en contra del tabaco en sí, pero sí del modo en que puede interferir con la seguridad vial. Fumar dentro del coche sigue siendo legal, pero en ningún caso puede comprometer tu atención, tu visibilidad o el respeto al medio ambiente.
Basta un instante de distracción para recorrer más de 100 metros sin control. Basta una colilla lanzada con descuido para causar un incendio forestal. Y basta un exceso de humo para dificultar la visión en plena autopista.
