El mantenimiento adecuado de nuestros vehículos es una obligación que muchos conductores descuidan hasta que es demasiado tarde. La DGT ha intensificado en los últimos meses sus controles para detectar coches que circulan en condiciones deficientes por las carreteras españolas. Los datos revelan que miles de conductores son sancionados anualmente por circular con vehículos que presentan deficiencias técnicas que comprometen tanto su seguridad como la del resto de usuarios de la vía.
Las consecuencias de conducir un automóvil en mal estado van mucho más allá de una simple multa económica. Las estadísticas demuestran que un porcentaje significativo de los accidentes de tráfico tiene como factor contribuyente algún fallo mecánico que podría haberse evitado con un mantenimiento preventivo adecuado. Los agentes de la DGT están especialmente atentos a cuatro elementos fundamentales cuyo deterioro supone un riesgo inmediato: neumáticos desgastados, sistemas de iluminación defectuosos, ausencia de ITV en vigor y sistemas de frenado ineficaces.
3ITV CADUCADA: LA INFRACCIÓN MÁS COMÚN Y FÁCILMENTE EVITABLE
La inspección técnica de vehículos constituye un filtro esencial para garantizar que los automóviles que circulan por nuestras carreteras cumplen con unos mínimos estándares de seguridad y emisiones. Circular con la ITV caducada supone una infracción grave que la DGT sanciona con 200 euros, cantidad que puede reducirse a la mitad si se abona en el período voluntario, aunque la penalización más severa llega con la prohibición de circular hasta regularizar la situación.
Los controles de la DGT detectan diariamente centenares de vehículos circulando con la inspección técnica caducada, siendo la infracción relacionada con el mantenimiento que más frecuentemente se denuncia. Las estadísticas revelan que aproximadamente un 20% del parque automovilístico español circula con la ITV fuera de plazo, situación que se ha visto agravada tras la pandemia. Los sistemas automatizados de lectura de matrículas permiten a los agentes identificar instantáneamente esta irregularidad, haciendo virtualmente imposible eludir la responsabilidad por este incumplimiento que, además de la sanción directa, puede acarrear problemas adicionales con las aseguradoras en caso de accidente.