El reciente anuncio del Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), el almirante Teodoro Esteban López Calderón, ha generado un importante debate en torno al papel de España en el apoyo militar a los países del Sahel. En un momento crítico en el que la región se enfrenta a una creciente amenaza terrorista, las declaraciones del JEMAD subrayan la urgencia de adoptar una estrategia más decidida y coordinada a nivel internacional.
Manteniendo el Apoyo a Ucrania
El JEMAD ha dejado claro que España mantiene su "intención muy clara" de continuar apoyando a Ucrania en su lucha contra la invasión rusa. Este apoyo se concretará en la adquisición de nuevo material bélico que será entregado a las fuerzas ucranianas para reforzar su capacidad de defensa. Aunque las Fuerzas Armadas españolas tienen limitaciones en cuanto a su propia disponibilidad de recursos, la voluntad del Gobierno y de la Unión Europea es clara: "mantener el apoyo a Ucrania el tiempo que sea necesario".
Carencias en las Fuerzas Armadas Españolas
A pesar de este compromiso, el JEMAD ha reconocido que las Fuerzas Armadas españolas siguen teniendo carencias en cuanto a personal y preparación para hacer frente a las nuevas amenazas, como los ataques cibernéticos y la confrontación en el espacio. Según sus estimaciones, se necesitará un plazo de entre cinco y siete años para que las Fuerzas Armadas estén "en condiciones" de hacer frente a estos desafíos, gracias a las adquisiciones y la mejora de la formación del personal militar.
Apoyando a los Países del Sahel
Pero quizás una de las declaraciones más relevantes del JEMAD haya sido su crítica al "exceso de restricción de apoyo a las Fuerzas Armadas" de los países del Sahel, que luchaban contra el terrorismo. Según López Calderón, la falta de adiestramiento y armamento adecuado a estas fuerzas les ha llevado a buscar el apoyo de Rusia, lo que ha agravado aún más la situación de inestabilidad en la región.
Para el JEMAD, es fundamental que la Unión Europea y los países occidentales afectados por el terrorismo en el Sahel "continúen apoyándoles, aunque de una manera diferente a los despliegues permanentes". Es decir, a través de un apoyo bilateral, país por país, sin regionalizar el problema, ya que cada nación tiene necesidades específicas.
Además, el nombramiento del español Javier Colomina como representante especial de la Alianza para la Vecindad Sur se perfila como una oportunidad clave para "operacionalizar" los acuerdos alcanzados en la Cumbre de Madrid y reforzar la cooperación en la región.
En definitiva, las declaraciones del JEMAD subrayan la urgencia de adoptar una estrategia más decidida y coordinada a nivel internacional para apoyar a los países del Sahel en su lucha contra el terrorismo. Solo a través de un compromiso sostenido y adaptado a las necesidades de cada país se podrá evitar que esta amenaza se siga propagando y afectando a la seguridad de España y Europa.
