La ciudad de Valladolid se ha visto conmovida por un terrible suceso ocurrido en el barrio de Pajarillos el pasado 2 de mayo de 2023. La Fiscalía de la ciudad ha solicitado una condena global de cuatro años de cárcel para el joven A.J.G., acusado como autor del atropello mortal de una mujer de 57 años. Este caso ha generado una gran conmoción en la comunidad y plantea importantes interrogantes sobre la seguridad vial y las responsabilidades que conllevan el manejo de vehículos.
El escrito de calificación provisional del fiscal del caso califica los hechos como un delito de homicidio por imprudencia grave y otro de abandono del lugar. La Fiscalía solicita dos años de privación de libertad por cada uno de estos delitos, así como la privación del derecho a conducir vehículos de motor y ciclomotores por un periodo de dos años y medio. Adicionalmente, se reclama una indemnización global de 156.206 euros a la familia de la víctima, incluyendo a su hija y cuatro hermanos.
LAS CIRCUNSTANCIAS DEL ACCIDENTE
Según la información recabada, el accidente se produjo alrededor de las 20:20 horas del 2 de mayo del año pasado, cuando el joven A.J.G., de 19 años en ese momento, conducía un Seat León ‘tuneado’ por el barrio de Los Pajarillos. La vía donde ocurrió el atropello estaba limitada a 30 kilómetros por hora, pero el vehículo del acusado transitaba a una velocidad de entre 38 y 45 kilómetros por hora.
En ese momento, la peatón María Soledad J.J., de 57 años, se encontraba terminando de cruzar la calzada cuando fue atropellada por el vehículo del joven. El impacto hizo que la víctima saliera despedida unos 18 metros, hasta caer sobre la terraza del Bar Ávila, donde recibió los primeros auxilios. Lamentablemente, la gravedad de las lesiones sufridas por María Soledad J.J. provocó que falleciera tres horas después en el hospital.
EL PROCEDER DEL CONDUCTOR
Según el escrito de acusación del fiscal, el joven no detuvo el vehículo ni prestó auxilio a la víctima, sino que continuó su marcha a gran velocidad por las calles adyacentes hasta ser localizado y detenido por agentes de la Policía Municipal en la Avenida de Segovia.
La defensa del acusado, sin embargo, niega que su patrocinado haya abandonado el lugar del accidente. Sostienen que el joven se acercó a la víctima, pero ante su grave estado y las advertencias de las personas presentes, se puso muy nervioso y decidió marcharse con el propósito de ir a casa de su padre para que le acompañara a la comisaría, algo que no pudo concretar porque fue interceptado en el trayecto.
Posteriormente, en su comparecencia ante la juez, el joven negó ir a alta velocidad y afirmó que la víctima, al ser sorda y muda, salió de repente sin darle tiempo a reaccionar. Cabe destacar que las pruebas de drogas y alcohol realizadas al conductor dieron resultados negativos.
LAS IMPLICACIONES LEGALES
La Fiscalía de Valladolid considera que el joven A.J.G. es responsable de un delito de homicidio por imprudencia grave y otro de abandono del lugar, por lo que solicita una condena global de cuatro años de cárcel. Además, pide la privación del derecho a conducir vehículos de motor y ciclomotores por un periodo de dos años y medio.
En el ámbito de la responsabilidad civil, el acusador público reclama que el joven, junto con la compañía de seguros Mapfre y el padre del acusado como responsable subsidiario, indemnicen a la familia de la víctima con una cantidad global de 156.206 euros.
Este caso ha generado un intenso debate en la comunidad de Valladolid, donde se cuestiona la seguridad vial y las responsabilidades inherentes al manejo de vehículos. La tragedia ocurrida en Pajarillos ha sacudido a la ciudad y ha puesto de manifiesto la necesidad de reflexionar sobre la importancia del cumplimiento de las normas de tránsito y la protección de los peatones, elementos fundamentales para prevenir este tipo de lamentables sucesos.