Consejeros del BCE tienen dudas del proceso de desinflación

La decisión del Banco Central Europeo (BCE) de bajar los tipos de interés en su última reunión no estuvo exenta de desacuerdos dentro del Consejo de Gobierno. Si bien la medida fue finalmente aprobada, un miembro se opuso a la misma y varios consejeros expresaron serias dudas sobre la conveniencia de este recorte, especialmente en relación con el cumplimiento del objetivo de inflación del 2% para 2025.

El resumen de la reunión del 4 y 5 de junio del BCE revela una discusión mucho más intensa de lo que se había dado a conocer inicialmente. Varios miembros del Consejo consideraron que los datos disponibles no respaldaban lo suficiente la decisión de bajar los tipos, ya que apuntaban a una mayor incertidumbre en las perspectivas inflacionarias.

La Inflación se Muestra Más Persistente de lo Esperado

Estos consejeros argumentaron que, a pesar de la tendencia general a la desinflación, el crecimiento de los salarios había sorprendido al alza y la inflación parecía ser más rígida, principalmente debido a la inflación de los servicios. Además, el ritmo de la desinflación interna se había sobreestimado en el período reciente y el crecimiento de los salarios también se había fortalecido.

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Por otro lado, las proyecciones del personal técnico para la inflación general y subyacente para 2024 y 2025 se habían revisado al alza en comparación con las de marzo, mientras que el retorno previsto de la inflación general al objetivo del 2% se había pospuesto hasta el último trimestre de 2025, después de un período ya prolongado de inflación elevada.

La Dificultad de Mantener las Expectativas de Inflación Ancladas

Estos miembros advirtieron que cualquier retraso adicional en volver a alcanzar la meta de inflación podría hacer más difícil seguir anclando las expectativas de inflación en el futuro. En conjunto, esto sugería que recortar las tasas de interés no estaba completamente en línea con el principio de dependencia de los datos, y que había motivos para mantener las tasas de interés sin cambios en la reunión actual.

Sin embargo, a pesar de estas reservas formuladas, finalmente se expresó la voluntad de apoyar la propuesta del economista jefe, Philip Lane, de bajar los tipos de interés en 25 puntos básicos. Esto revela la existencia de una postura disidente dentro del Consejo de Gobierno a la hora de tomar esta decisión de política monetaria.

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