El histórico dirigente de Izquierda Unida (IU), Carlos Sánchez Mato, ha lanzado un contundente mensaje tras los resultados de las elecciones europeas, señalando directamente a Sumar como responsable del «desastre» que ha supuesto para la izquierda transformadora española.
La autocrítica como punto de partida: IU se queda fuera del Parlamento Europeo
Sánchez Mato no ha dudado en señalar la «clara responsabilidad» de Sumar en la debacle electoral, que ha dejado a IU fuera del Parlamento Europeo por primera vez en su historia. En un mensaje difundido a través de la red social ‘X’, el que fuera responsable del área de Programa en la última ejecutiva de IU, ha instado a la formación a «asumir» las consecuencias de este resultado.
«Lo mismo algún día nos dejamos de hostias, de peleas cainitas y de miopía y nos dedicamos a ser herramienta útil», ha espetado Sánchez Mato, en una clara crítica a la falta de unidad y estrategia que ha caracterizado a la izquierda en los últimos tiempos.
El descalabro electoral se ha saldado con un escaso 4,65% de los votos para Sumar, mientras que Podemos ha logrado un 3,27%. En total, la suma de ambas formaciones apenas alcanza el 7,92% del total de los votos emitidos, un resultado que Sánchez Mato no ha dudado en calificar de «mierda».
La necesidad de una profunda reflexión para el futuro de la izquierda
Ante esta situación, resulta evidente la necesidad de una profunda reflexión por parte de las fuerzas de izquierda en España. La falta de unidad, las luchas intestinas y la incapacidad para conectar con el electorado han lastrado las posibilidades de un bloque político que, en otros tiempos, aspiraba a liderar un cambio de rumbo en el país.
La autocrítica debe ser el punto de partida para la reconstrucción de un proyecto sólido y creíble para la izquierda transformadora. Es necesario superar las divisiones, definir una estrategia común y, sobre todo, recuperar la confianza de la ciudadanía con un discurso claro, contundente y que responda a las necesidades reales de la sociedad.
En un contexto marcado por la creciente desigualdad, la crisis climática y el auge de la extrema derecha, la izquierda española tiene ante sí el reto de estar a la altura de las circunstancias. El futuro de la izquierda, y del país, depende de ello.