Google Chrome se ha convertido en uno de los navegadores más populares y ampliamente utilizados en todo el mundo. Sin embargo, para muchos usuarios, su consumo de recursos puede resultar excesivo y afectar el rendimiento general del sistema. Afortunadamente, existen varios métodos disponibles que pueden ayudar a mejorar significativamente el rendimiento de Chrome. A continuación, te presentamos algunas soluciones que puedes probar para optimizar tu experiencia de navegación.
1¿Te va lento Google Chrome? Haz este ajuste 
                                
                            Para muchos usuarios, Google Chrome es considerado uno de los navegadores más completos disponibles en la actualidad. A lo largo de los años, Google ha continuado añadiendo nuevas funciones y mejoras para ofrecer una experiencia de usuario aún mejor. Sin embargo, este enfoque hacia la expansión de características también ha generado un desafío significativo para aquellos que utilizan dispositivos con recursos limitados. Esto se debe a que estas funciones adicionales pueden aumentar el consumo de recursos del navegador, lo que puede afectar el rendimiento en equipos menos potentes que necesitan una optimización más cuidadosa de todas las aplicaciones que utilizan en su vida diaria.
Afortunadamente, Google Chrome ofrece una serie de ajustes accesibles a través de su menú de Configuración que pueden ayudar a abordar este problema. Sin embargo, es importante tener en cuenta que realizar cambios en la configuración del navegador puede tener un impacto en su funcionamiento y rendimiento. Por lo tanto, es crucial comprender completamente las implicaciones de cada ajuste antes de realizar cualquier modificación. Se recomienda precaución, especialmente para aquellos usuarios menos experimentados que podrían no estar familiarizados con el funcionamiento interno del navegador.
Para acceder al menú de optimización de memoria en Google Chrome, primero debemos dirigirnos a nuestro perfil en el navegador y hacer clic en los tres puntos verticales ubicados en la esquina superior derecha de la pantalla. Luego, seleccionamos la opción "Configuración" del menú desplegable que aparece. Dentro del menú de configuración, encontraremos diversas opciones para personalizar la experiencia de usuario en Chrome. En la barra lateral izquierda, buscamos la pestaña "Rendimiento" y hacemos clic en ella para acceder a las configuraciones relacionadas.
Una vez en la pestaña de "Rendimiento", buscamos la opción de "Ahorro de memoria" y la activamos. Esta función permite desactivar las pestañas en segundo plano que estén consumiendo memoria RAM, pero que no estén siendo utilizadas en ese momento. Al desactivar estas pestañas, podemos congelar su actividad para evitar que comprometan el rendimiento del navegador al consumir recursos innecesarios.
En algunos casos, es posible que haya pestañas específicas que no queremos que se congelen nunca. En ese caso, podemos seleccionar la opción "Mantener siempre activos estos sitios" y elegir las pestañas que deseamos que sigan actualizándose en segundo plano, incluso cuando no las estemos utilizando directamente.
Además del ahorro de memoria, otra opción importante que podemos encontrar en este menú es el ahorro de energía. Por defecto, esta función suele estar activada cuando la batería del dispositivo está al 20% o menos. Al activar esta opción, Chrome reduce la actividad en segundo plano y disminuye los efectos visuales, como la fluidez del desplazamiento y la velocidad de los vídeos, con el objetivo de reducir el consumo de energía. Esta configuración se puede personalizar para activarse solo cuando la batería está por debajo del 20% o cuando el dispositivo está desconectado de la corriente eléctrica.





