Ahora sí que podemos decir que la DGT se pasó. Con la llegada del verano y las altas temperaturas, es común que los conductores lleven consigo agua u otras bebidas para hidratarse mientras conducen. Sin embargo, lo que muchas personas desconocen es que, según la Dirección General de Tráfico (DGT), beber agua al volante puede ser motivo de una multa.
2¿Por qué la DGT considera que beber agua al volante es peligroso?

La DGT considera que beber agua al volante puede distraer al conductor de su tarea principal, que es conducir con seguridad. Según la normativa de tráfico, los conductores deben mantener sus manos en el volante y su atención enfocada en la carretera en todo momento. Al beber agua, la DGT considera que los conductores deben apartar una de sus manos del volante y desviar su atención de la carretera, lo que puede incrementar el riesgo de sufrir un accidente.
Además, si un conductor derrama agua u otra bebida mientras conduce, puede afectar la visibilidad y el control del vehículo. Por lo tanto, aunque beber agua al volante puede parecer una práctica inocua e inofensiva, la DGT lo considera una actividad peligrosa que puede poner en riesgo la seguridad vial.