Está más que comprobado que las estaciones del año afectan al estado de ánimo. El invierno, con sus noches largas y su clima adverso, puede llegar a provocar algunas complicaciones en la salud mental de muchas personas. A veces, es necesario implementar algunas acciones para prevenir que este bajo ánimo llegue a afectar de forma seria a nuestro bienestar y nuestra calidad de vida. Hay personas que llevan verdaderamente mal el frío y durante los meses de invierno sienten apatía, tristeza y un desánimo que puede derivar en depresión.
No a todo el mundo le afecta igual el frío, de hecho hay muchas personas que sufren problemas de ansiedad ante las elevadas temperaturas del verano. Sin embargo, el bajo ánimo del invierno tiene varias explicaciones. También hay que destacar que los síntomas depresivos dependen mucho del país y de las características de sus inviernos. No es lo mismo vivir en un lugar donde hace frío todo el año que en otro donde la variación térmica es muy fuerte en cada estación.
4HACER ALGO DE EJERCICIO
Es bastante normal que cuando llega la época de frío y lluvia no apetezca demasiado hacer deporte. Sin embargo, el clima no debería ser una excusa, ya que también podemos hacer una rutina de ejercicio en un espacio cerrado. Movernos y practicar deporte es una ayuda infalible para favorecer que nuestro cerebro produzca neurotransmisores como la dopamina o la serotonina, relacionados con el refuerzo y la activación cerebral.
También se produce endorfinas, asociadas al aumento del placer. Por otra parte, ejercitarnos mejora nuestra autoestima, no tanto pro un tema estético o físico, como por la satisfacción de marcarnos un objetivo y ser capaces de cumplirlo. Si hay algún antídoto infalible para ser más feliz, ese es el ejercicio físico.