Se puede asegurar que el salmón asado es una de las recetas más fáciles de preparar y que además es rico, saludable y saciante. Prepararlo perfecto tiene su truco; sin embargo, no se trata de utilizar una extensa lista de ingredientes ni de utilizar procesos complejos, puesto que apenas un adobo sencillo y los minutos justos de cocción, serán suficientes para un resultado perfecto.
Hay muchas maneras de asar el salmón; y es por ello que hoy te contaré como hacerlo verdaderamente jugoso según la forma en que decidas asarlo.
10Cómo saber que el salmón está en su punto perfecto
El calor interno del pescado te dirá si está perfectamente jugoso o si, por el contrario, está muy seco. Para saberlo, puedes recurrir a un termómetro de cocina. Si tienes un termómetro de cocina, toma la temperatura interna de los filetes, esta debe estar entre los 43 y 60 °C. Si la temperatura es inferior, le falta cocción, si sobrepasa los 60 ° C estará seco.
En caso de no tener un termómetro de cocina, fíjate en el color interno. Para hacerlo, abre un poco la carne del pescado y observa su color, este debe verse de un color rosa traslúcido; esta será la señal de que está listo.
Para disfrutar al máximo de un salmón asado bien jugoso, déjalo reposar por 5 minutos antes de llevarlo a la mesa.
