«Gracias a todos los que con su confianza en mi trabajo me permiten seguir arando, sembrando y cosechando. Cosechando frutos como este«, afirmaba un emocionado José Sacristán al recibir, este sábado, el Goya de Honor por su impresionante carrera y su protagonismo en el panorama cinematográfico, televisivo y teatral de nuestro país desde hace más de 60 años.
En plena forma a sus 84 años y asegurando que no se le pasa por la cabeza retirarse por el momento, hemos podido hablar con el actor a su llegada a la capital después de haber vivido una de las noches más importantes y emocionantes de su vida. «Estoy muy agradecido. Ha sido una noche para el recuerdo, totalmente. Muchísimas gracias«, ha señalado, asegurando que «no hay tanta diferencia entre lo que yo pensaba que esto podía dar de sí y lo que está dando«. «Sé que disfruto de una condición de privilegio y siento un profundo agradecimiento«, ha explicado.
Con la ‘flema’ que le caracteriza, José ha confesado que, además de destacar «el reconocimiento que se me hizo«, fue una entrega de premios «muy festiva y muy dinámica». «Estuvo muy bien«, ha añadido, asegurando que no fue una noche especialmente de reencuentros porque «en realidad sigo trabajando y los encuentros los tengo todos los días«.
¿Sabe ya qué lugar de honor tendrá su Goya de Honor en su casa? Parece que por el momento no: «Yo que sé, tendrá su sitio. Como todos, a mí me parece que los reconocimientos tienen, moralmente, todos el mismo valor», ha destacado con la humildad que le caracteriza en sus primeras declaraciones tras hacerse con este premio tan especial a toda su trayectoria.
