¡Una de bravas! Aquí tienes las mejores de Madrid

  • Ración por excelencia de Madrid, las patatas bravas son una de las tapas más versátiles de la gastronomía española.
  • Para que no te pierdas nada, aquí te traemos las mejores de la capital.

Una de las raciones por excelencia en Madrid son las patatas bravas. En 1967, el periodista Luis Carandell describió a “las patatas bravas, que en algunos sitios se llaman patatas a lo pobre” como “patatas fritas con salsa picante” en su obra Vivir para Madrid. La ONU, en 2008 reconoció el origen inequívocamente español de este plato.

Aunque tradicionalmente la salsa se ha hecho con pimentón, tomate, cebolla, ajo, agua, aceite, vinagre y sal, actualmente existen numerosas versiones que elevan las patatas bravas a un manjar digno de dioses. Aquí te presentamos las mejores de Madrid:

Casino de Alcalá

Bravas
Casino De Alcalá

Basta media hora de conducción para dejar de ser madrileño y convertirse en viajero, ese que mira con ojos de turista aunque no haya abandonado siquiera su propia comunidad. Ubicada al nordeste, Alcalá de Henares alberga la Universidad, declarada Patrimonio de la Humanidad, la célebre casa natal de Cervantes y otros edificios y monumentos cuyo valor histórico hace pensar que aquí la vanguardia no es posible. Sí lo es. Al menos, en lo culinario. Ello se debe en gran parte a Monio Group, sello hostelero de referencia en el municipio, con diez años de experiencia y una política de expansión que solo ha sido ambiciosa a nivel local, pues busca revitalizar la ciudad y medirla con la escena gastronómica capitalina. 

Casino ofrece una cocina casera de temporada, elaborada con productos de proximidad y de precios razonables, en línea con la filosofía de los otros negocios creados por Fran Rodríguez. Ejecuta este concepto Ramón Cuesta, cocinero de vocación que atesora más de 36 años de experiencia, pues se consagró a su pasión siendo casi un niño. Aquí ha diseñado una carta que incluye recetas muy reconocibles con acento nacional , como las patatas bravas, que en ocasiones aceptan toques de atrevimiento, como los torreznos soufflé con pimientos de padrón, uno de los platos más demandados por su insólita textura.