La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, ha rechazado este jueves las «formas» de Unidas Podemos con su actitud dentro del Gobierno, a cuenta del último choque entre los socios de la coalición por las iniciativas de Igualdad. Además, ha denunciado su «incoherencia» al no apoyar, y abstenerse, ante la ley de Igualdad de Trato promovida en solitario por el PSOE en el Congreso.
De hecho, la ‘número dos’ del Gobierno y responsable de Igualdad del PSOE ha instado a Unidas Podemos a preguntarse «por qué está en política y para qué», si no es capaz de apoyar una iniciativa que «dice que nadie puede estar discriminado en nuestro país».
«SE ESTÁ EN POLÍTICA PARA LAS COSAS QUE SON REALES»
«Se está en política para las cosas que son reales, verdaderas y eficaces, y eso tiene una coherencia. Más bien, el problema está en la coherencia», ha sentenciado en una entrevista en la Cadena SER.
Además, ha confirmado que su secretario de Estado de Relaciones con las Cortes le trasladó las informaciones que le estaban llegando de que Unidas Podemos estaba hablando con los grupos de que se iba a abstener ante la admisión a trámite de la ley de Igualdad de Trato –la bautizada ‘ley Zerolo’–.
También ha defendido el derecho de su partido a impulsar iniciativas en materia de Igualdad, como han hecho siempre, «por mucho gobierno de coalición» que tengan con Unidas Podemos. «Todas las leyes de igualdad las ha hecho el PSOE», ha recordado.
«Esta es la historia indiscutible e irrebatible del PSOE, y a partir de ahí, para nosotros las políticas de igualdad, por mucho gobierno de coalición que tengamos, siguen siendo muy importantes las que nos puedan corresponder a nosotros», ha reivindicado.
Sobre el aumento de la tensión y en enfrentamiento entre Unidas Podemos y el PSOE por las políticas de Igualdad, Calvo ha confesado que le «preocupan más las formas que el fondo». «Lo normal en el Gobierno es que tengamos discrepancias en algunos contenidos. A mí lo que me preocupan son las formas», ha apostillado.
«Yo lo vivo con esa normalidad. A veces lo que no me resulta útil es que todo esto tenga que formar parte de una situación que los ciudadanos dirán: oye, hagan el trabajo, díganme cómo me va a afectar y ya veré si me gusta y votaré lo que quiera», ha reflexionado.
El sector socialista del Gobierno ya ha manifestado en numerosas ocasiones su malestar por el proceder de Unidas Podemos para visibilizarse dentro del Ejecutivo, aireando los debates internos e incluso «filtrando» documentos que carecen de consenso, tal y como acusó Moncloa al Ministerio de Igualdad, cuando se hizo público un borrador de la polémica ley Trans que prepara el departamento de Irene Montero.
«LEGISLACIÓN LGTBI» QUE INCLUYA A LOS TRANS
«Esos borradores que me pasó suelen ser de trabajo interno», ha defendido Calvo a este respecto, antes de destacar que la «cultura política» del PSOE es «diferente» a la de Unidas Podemos, «como es evidente».
«Tenemos una cultura de gestión y política diferente de la suya. No la califico, que es diferente. Estamos todos los cuadros del PSOE muy acostumbrados a tener cargos públicos, y sabemos que una cosa es la comunicación que puedes hacer simplemente de las ideas, porque la ciudadanía no está pendiente de la complejidad de estas cosas. Lo que le interesa saber es que vamos a hacer una ley LGTBI», ha enfatizado.
Así, ha insistido en que «los cargos públicos del PSOE» están «muy acostumbrados a saber que las leyes son muchas horas de despacho, muchos papeles y a hablar con mucha gente hasta que llegas al final».
En este sentido, sobre las acusaciones de Igualdad por «bloquear» esa norma para que no llegue al Consejo de Ministros, Calvo ha asegurado que forma parte del funcionamiento normal del Gobierno y de su responsabilidad como ministra de la Presidencia frenar las leyes cuando no están listas, y pedir que se revisen o se recaben más informes.
Este es el procedimiento que, según ha relatado, está siguiendo con Montero, para que pueda ver pronto la luz la que ha definido como legislación LGTBI, en la que Calvo incluye las cuestiones Trans, a pesar de que la ministra de Igualdad quiere desarrollar dos leyes por separado: por un lado, la ley LGTBI y por otro, la ley Trans.