La Policía contabilizó en España 130 casos de secuestros virtuales en 2019

Los investigadores de la Sección de Secuestros y Extorsiones de la Policía Nacional trataron un total de 130 casos de secuestros virtuales en España, principalmente en Madrid, Cantabria, Zaragoza y Valencia, durante 2019.

De estos 130 casos, en 107 se interpuso denuncia, en cinco se llegó a pagar dinero y en dos ocasiones se pudo recuperar ese dinero, según datos facilitados por la Policía Nacional.

Entre las características principales de los secuestros virtuales destacan la sorpresa y el estado de angustia en el que se sume a la víctima. Habitualmente son llamadas inesperadas provenientes de números ocultos o con prefijo del extranjero.

Lo que buscan los delincuentes, según sostiene la Policía, es provocar la máxima angustia y bloqueo emocional, por lo que son muy agresivos y directos, incluso pueden llegar a poner al teléfono a terceras personas que imitan gritos y lloros de las supuestas víctimas.

Otra de las estrategias de los secuestradores virtuales, alerta la Policía, es tratar de prolongar al máximo la llamada para evitar ninguna reacción de la víctima, de manera que no pueda avisar a la Policía, y obtener el dinero sin llegar a colgar el teléfono, principalmente a través de empresas de envío de dinero.

Ante la proliferación de estos casos, la Policía activó campañas en redes sociales que, bajo el hashtag #NoEsReal, ofrecen información y consejos sobre cómo reaccionar en caso de recibir una llamada de este tipo.

Estas unidades de Policía, que según el Cuerpo están preparadas para reaccionar en cuanto se denuncie un intento de secuestro virtual, recomiendan unas pautas de prevención básicas pueden evitar que los ciudadanos se conviertan en víctimas de este tipo de extorsiones.

Así, se pide a los ciudadanos que desconfíen si le dicen que han secuestrado a un familiar, incluso si se pone otra persona o se escuchan voces de fondo; que se mantenga la calma ante la presión ejercida por el falso secuestrador, que usará violencia verbal de cualquier tipo; y que compruebe la información que le están aportando los falsos secuestradores.

También que no realice ningún pago porque exigirán un pago rápido para no dar tiempo a localizar al familiar y que no se facilite los datos personales -y tampoco los publique en redes sociales-. Y, especialmente, que avise a la Policía Nacional (091) y se intente localizar al supuesto secuestrado por otra línea, así como, en la medida de lo posible, grabar la llamada maliciosa.

SERVIMEDIA