Muchas veces comer en un bar o un restaurante tiene una desagradable sorpresa a la hora de pagar con cargos que nunca pensaste que añadirían a la factura. Aquí algunos de ellos.
2El menú del día NO se puede compartir
"Eh, eh, qué estás haciendo, que tú te has pedido el filete y está cogiendo merluza, ¿qué haces?". Esta entrometida pregunta se puede escuchar a diario en bastantes bares de nuestro país. El camarero te fusila con la mirada cuando le coges un trozo del plato al de al lado para probarle. ¡NO SE PUEDE! Te lo repite una y otra vez a voces.





