Los éxitos empresariales de Messi no se corresponden con sus éxitos deportivos, tanto es así que el restaurante que el argentino abrió en la Ciudad Condal hace dos años se ha visto obligado a echar el cierre.
Los catalanes ya no podrán reservar mesa en el “Bellavista del Jardín Del Norte”, si es que alguna vez lo hicieron. El mentidero del crack argentino solo ha dado pérdidas, por lo que el jugador y sus socios del Grupo Iglesias han decidido cerrarlo y “cambiar el modelo de negocio”, tal y como informa el diario deportivo ‘AS’.
El local, de más de mil metros cuadrados, no ha soportado la realidad que acontece a Cataluña, “La turismofobia, la crisis, los atentados, el aumento brutal de la inseguridad ciudadana, la política… El problema es cuando todo eso se convierte en una tendencia”, aseguró uno de los socios del 10.