El Centro Nacional de
Huracanes de EEUU ha rebajado a categoría 4 al huracán “Irma”, pero asegura que continúa fuerte, con vientos sostenidos de 260 kilómetros por hora.
Según los expertos, la
trayectoria muestra su avance por las islas Turcas y Caicos, hacia el sureste
de las Bahamas, para continuar por el norte de la costa cubana este sábado y después,
todo apunta a que el ojo de destrucción de “Irma” alcanzará Florida hacia
última hora del domingo.
@FLGuard is READY and PREPARED for #HurricaneIrma. Our Soldiers & Airmen are here in your times of need. #FLNGAlwaysThere #WeWorkforYou pic.twitter.com/1llXNFaOHO
FloridaNationalGuard (@FLGuard) 7 de septiembre de 2017
El Gobernador de Florida, Rick Scott, ha urgido a abandonar las zonas de evacuación y ha subrayado que “Irma” es peor que “Andrew” en 1992 y que tiene el potencial de devastar el estado.
I'm traveling to communities across FL to discuss #HurricaneIrma preparedness. Next stop: Jacksonville EOC to provide an update at 2:45pm. pic.twitter.com/km86OiG4u8
Rick Scott (@FLGovScott) 7 de septiembre de 2017
Las autoridades ordenaron
las primeras evacuaciones en Miami el miércoles. No en vano, las medidas de emergencia son extremas, dado que
la región se encuentra al ras de mar y ha ordenado. Según ha publicado el diario
Miami
Herald, en el peor de los escenarios las inundaciones podrían alcanzar
hasta los 3 metros de altura sobre el nivel del suelo.
Gran congestión por evacuación de Miami ante próximo arribo del huracán Irma. pic.twitter.com/E1oEZDNt9W
US Election 2020 (@Eleccion_USA) 8 de septiembre de 2017
Pero la amenaza de “Irma” también
alcanza al estado sureño de Georgia, que en las últimas horas ha decretado el
despliegue de 5.000 efectivos de la guardia Nacional y la evacuación de
Savannah y otras zonas costeras.
En Cuba, mientras tanto, se
ha decretado el estado de alarma en toda la mitad oriental de la isla, y unas
700.000 personas ya han sido evacuadas de sus hogares. Está previsto que
esta noche vientos de entre 60 y 120 km/h azoten la zona.
De momento, los efectos del
ciclón, que ha sido calificado como el peor del Atlántico en un siglo, se ha
cobrado la vida de 14 personas en las Antillas Menores y Puerto Rico y los daños
materiales aún son imposibles de cifrar.