Corea del Norte ha reabierto el Campamento Infantil Internacional Songdownon tras realizar una serie de reparaciones. El campamento cuenta con toboganes de agua gigantes, una playa privada, videojuegos y pistas de voleibol, entre otras cosas, y recibió este martes a más de 300 adolescentes y niños de Rusia, China, Vietnam, Irlanda y Tanzania.
Los jóvenes pasan ocho días realizando actividades como nadar, cocinar y relacionándose con niños coreanos. Además, tienen la oportunidad de conocer un país misterioso para el resto del mundo y dormir en habitaciones climatizadas y con mobiliario de lujo. Aunque el campamento recibe grandes subsidios del gobierno de Kim Jong Un, a cada niño le cuesta las vacaciones unos 270 dólares.
El campamento infantil lleva en funcionamiento desde hace 30 años y su objetivo de profundizar en las relaciones con los paises del bloque comunista o No Alineado, pero ahora están dispuestos a recibir a niños de todas partes del mundo, incluso de Estados Unidos.